Mucho se están cuestionando las acciones sobre todo del gobierno federal para tratar la pandemia de Covid-19 o coronavirus que ha llegado a México ya desde hace unos días.

Miles están pidiendo que ya se cierre el país completamente y sus fronteras para evitar que haya contagios de la enfermedad que ha azotado al mundo, pero sobre todo a Europa y lejano oriente.

¿Por qué no cerrar el país y cancelar todo evento masivo desde la primera etapa y no esperar a la segunda parte, ya que haya más enfermos y obvio más contagios?, es la pregunta que se repite constantemente.

El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud del gobierno federal, Hugo López-Gatell Ramírez, en la conferencia de prensa dio un ejemplo de su actuar:

“Vamos a suponer que tenemos una escuela de mil niños, nadie está infectado y de repente de esos mil, un niño tiene la infección; si yo cierro la escuela en ese momento voy a tener un efecto positivo, porque estoy evitando que un niño contagie a 999 niños”.

“Si yo, en lugar de cerrar la escuela en ese momento me espero a que la escuela tenga, por ejemplo, 10 niños infectados, puedo cerrar la escuela y esa medida aplicada a 10 contra 990 es más efectiva que si la cierro cuando es sólo uno contra 999”.

“Si me espero aún más y tengo, por ejemplo, 100 niños infectados, es todavía más efectiva la intervención, porque estoy evitando que 100 tienen una mayor fuerza de infección, así se llama técnicamente, para contagiar a los 900 restantes (…)”

“Pero si yo me espero hasta llegar cuando haya, por ejemplo, 400 infectados y 600 no infectados también puede ser demasiado tarde, porque ya no protegí a todos los que se fueron infectando, ¿si? era uno en mil la utilidad es baja, si era 400 en mil la utilidad es máxima, pero es demasiado tarde”.

“Entonces, tengo que encontrar un punto ideal, un punto óptimo”.

 “Si yo cierro esas actividades paralizó a la sociedad y, como hemos dicho en otras ocasiones, alguien tiene que producir los alimentos, alguien tiene que producir los insumos, alguien tiene que cuidar el alumbrado público, el drenaje, la fabricación de los materiales y entonces no puedo cerrarlo todo, porque afectaría al funcionamiento de la ciudad, y esto puede traer muy graves consecuencias”, explicó el funcionario.

Por su parte, el doctor Hugo Eloy Meléndez, próximo rector de la Universidad de la Salud de Puebla, en un posteo de Facebook, también puede dar una aclaración.

Cerrar las universidades y escuelas desde este martes no cambiará en nada el curso de la pandemia”, asegura.

El virus ¡ya está entre nosotros!, los estudiosos de la salud pública y epidemiología nos han dado cátedra cada día a las 19:00 horas, del curso que seguirá la pandemia en nuestro país”.

Y afirma que no se ha ocultado nada, ya que es un hecho que los casos de personas contagiadas crecerán exponencialmente en los próximos días y fallecerán irremediablemente personas vulnerables.

Por lo mismo, justifica en su publicación de la red social, que al instruir al país a entrar en la fase de aislamiento social a partir del día 23, es justamente porque el comportamiento de la infección colectiva (pandemia), tendrá su pico la segunda tercera semana de abril.

Entonces, dice, para esa fecha las medidas de aislamiento social cobran sentido y minimizarán los efectos en la población si se extreman las medidas de higiene y no se sale sin razón de las casas.

Iniciar hoy con la suspensión de clases y de labores, generará pérdidas económicas incalculables sin razón fundada”, afirma el galeno y también ex secretario general de la Universidad Autónoma de Puebla.

De este modo, recuerda a la pandemia de H1N1 en México, la que duró de 2009, hasta julio de 2010, donde se confirmaron 72 mil 548 casos y 1316 muertes, según cifras de la Secretaría de Salud del gobierno de Felipe Calderón.

En ese entonces ya trabajaba en la Secretaría de Salud el Dr. López-Gatell como director Adjunto de Epidemiología de la SSA, y vivió la experiencia de enfrentar esa calamidad”, explicó.

Todo el país debiera estar atento a las indicaciones de ellos, en lugar de andar opinando lo que no sabemos”, pidió.

¿Economía o salud? eh ahí el dilema.

Tiempo al tiempo.