Gilberto Higuera Bernal, Fiscal General del Estado, tiene al enemigo en casa y no se ha dado cuenta o no se quiere dar cuenta, pero este enemigo provocó un escándalo con los contagios de Covid-19, qué día a día siguen aumentando en las instalaciones de la Fiscalía General del Estado, sin que haya tenido oportunidad de hacer algo al respecto, porque le han ocultado los informes de lo que realmente está pasando con la pandemia.
El fiscal recibió la solicitud de la Secretaría de Gobernación y de Salud para que entregará un informe sobre cómo se encontraba la institución relacionada con los casos de Coronavirus, por lo que dio indicaciones al suboficial mayor Cristóbal Arrieta Desentis, de que se hiciera un informe y se entregará de manera inmediata y precisa.
Lo malo es que el informe hizo quedar mal al fiscal del estado, porque en transparencia, tenían otros datos y estos no eran alentadores, por lo que se ganó una reprimenda.
Molesto, Gilberto Higuera Bernal ordenó a su oficial mayor, que pidiera la renuncia del responsable de manera inmediata, por lo que mandó llamar a su despacho a la jefa de recursos humanos y adquisiciones Huri Verónica Herrera Corichi, para avisarle que se iba a tener que enfermar y solicitar licencia de su cargo.
Y es que Verónica Herrera Corichi es la encargada de revisar este trabajo, que realiza de manera directa Jorge Flores Mendoza, quién es jefe de indicios, otro de los implicados en el pésimo informe.
Pero algo pasó, "el hilo se rompió desde lo más delgado", como ocurre en estos casos, Y a quién decidieron pedirle la renuncia fue a Leticia García, la subdirectora, a quién sin que ella estuviera enterada responsabilizaron de la falta, pero le dijeron que "no se preocupara", qué "sólo eran unas vacaciones”, y que de regreso la iban a colocar en otro cargo.
Y de esta forma trataron de tapar un hoyo que es más profundo de lo que piensan, porque la FGE es un pandemónium de Covid-19.
Un muerto en los separos, Agentes y MP contagiados
Y es que el mal manejo en la Fiscalía para atender el contagio de Coronavirus, ya provocó que un detenido muriera en los separos del edificio de la 31 Oriente y Boulevard 5 de mayo, y de que se hayan registrado otros enfermos, además de que por lo menos en cinco ocasiones han tenido que sanitizar los espacios.
Aunado a esto, por lo menos 15 elementos de la Fiscalía de Investigación de Secuestros y Delitos de Alto Impacto fueron contagiados, así como dos agentes del Ministerio Público y un indeterminado número de policías ministeriales.
Un defensor de oficio, Felipe Tlatoa Ponce, escribió en su Facebook el 28 de mayo:
"Hoy me entero que varios de los Agentes del Ministerio Público que trabajan en FGJ han dado positivo a COVID-19, y todo por qué sus jefes los obligan a trabajar sin las medidas de seguridad necesarias, pidiendo cosas que no son urgentes como, informes, estadísticas, etc., porque para los altos mandos todos son reemplazables. Incluso en FISDAI hay muchos contagiados".
"Ayer una MP que hoy salió positivo a Coronavirus, andaba en Centro de Justicia Penal interactuando con personal de TSJ, Defensores y víctimas. Y los jefes de FGJ piensan que no es que tengan síntomas sino que solo son flojos y no quieren trabajar y los amenazan con perder su trabajo! Y en el colmo de los absurdos, sin tener un ápice de responsabilidad social todavía los amenazan para que no digan que están enfermos de COVID-19 porque en la fiscalía no pasa nada. Señores los AMP son servidores públicos con contacto con mucha gente, cada que se enferme uno deben avisar, para que las personas que tuvieron contacto con el tomen las precauciones necesarias, eso se llama RESPONSABILIDAD SOCIAL!"
(Hasta aquí la publicación).
Y ahora en la FGE presumen que con el despido de la subdirectora Leticia García, van a poder tapar, el gran problema que enfrentan con el contagio, que ya nada más les falta aislar todas las instalaciones y no dejar salir al personal, cómo está ocurriendo en el cuarto piso del C-5, donde todos los empleados se encuentran aislados por haber resultado positivos el Coronavirus.
Nos vemos cuando nos veamos.