¿Qué le asombra más?
¿Enterarse que en Puebla se registró un robo a casa habitación de 90 millones de pesos en billetes de diversas denominaciones e incluso dólares?
¿O la falta de total información, a la que nos encontramos expuestos todos los poblanos, lo que nos convierte en vulnerables a la delincuencia?
Usted ya está enterado, que gracias a un trabajo periodístico del medio nacional Imagen Noticias, se reveló la detención de un colombiano, qué en su teléfono celular, guardaba imágenes de un robo ocurrido en Puebla, donde se aprecian pacas de billetes, que fueron sustraídas por una banda que opera en diversos puntos del centro del país.
Lo que usted y un servidor no estamos enterados, es cuándo y cómo se dio este robo, y si este delito fue denunciado ante la Fiscalía General del Estado (FGE), o si existe alguna información en la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), o la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.
Un robo de esa magnitud, debe haber ocurrido a una familia de empresarios, inversionistas, alguna dependencia del Gobierno del Estado o de Puebla Capital, donde obviamente se pueda justificar su procedencia.
De ser así, nos encontramos en otro caso más, donde los delitos que ocurren en el estado son ocultados con la intención de no alterar las estadísticas de seguridad pública, sin importar que de manera subterránea se sepa que la delincuencia es la que está ganando en Puebla.
Al respecto del hallazgo del video, nadie se preocupó por preguntarle al gobierno de Puebla, sí ya sé tenía información en qué lugar ocurrió la felonía, qué dónde se encontraba este dinero actualmente, además de que quienes componían la banda de colombianos que se adjudica el robo.
Nadie dijo nada, no hubo preguntas ni respuestas, la nota fue publicada como algo "chistoso" y cómo trascendió el fin de semana, para el día lunes la información se va a perder, porque seguramente otro hecho de policía acaparará las principales notas de los medios locales de información.
La Fiscalía General del Estado (FGE), se va a salvar de dar explicación alguna, y todos los poblanos nos vamos a preocupar más por la nueva normalidad para poder salir a las calles.
Pero lo cierto es que en una casa de la ciudad de Puebla fueron robados 90 millones de pesos en efectivo, que no se sabe si el dinero es lícito o ilícito, qué puede ser como consecuencia de un magnífico negocio o del lavado de dinero entre organizaciones criminales.
Lo ocurrido vuelve a llevar a la misma pregunta ¿y la seguridad de Puebla?
¿Cuánto dinero subterráneo se mueve entre organizaciones de maleantes que atrae a otros delincuentes?
¿Cómo se encuentra la población para poder descansar en sus casas sin tener el temor de qué van a ser asaltados?
Nos vemos cuando nos veamos.