Es tan simple la pregunta que se hacen los padres de dos jóvenes mujeres que en circunstancias distintas desaparecieron en el municipio de Tecamachalco, una oriunda de ese lugar y la segunda que llegó de visita, procedente de la ciudad de Puebla.
Poco ha importado al Ayuntamiento de ese municipio, a la Fiscalía General del Estado, la desaparición de estas jóvenes y de otras mujeres que en forma constante aparecen en redes sociales como no localizadas, nadie hace ningún esfuerzo para buscarlas y en un caso más trágico por lo menos para saber dónde quedaron.
El caso de Nayeli Cruz García, de 24 años de edad, es de todos conocido, desapareció el pasado 24 de septiembre, hace 28 días, cuando salió de su domicilio, en la colonia La Purísima, para dirigirse a su trabajo en una pizzería.
Un día después, la joven quien tiene una niña de 4 años, apareció en un video en un mensaje de WhatsApp, dónde se encuentra desnuda y con un velo cubriendo el torso, justo en los momentos en que recibe un balazo en la cabeza.
Supuestamente el lugar donde fue ejecutada ya se encuentra ubicado por la Fiscalía General del Estado; sin embargo, hasta el momento no ha sido localizado el cuerpo de la joven ni han sido detenidos los responsables.
El caso de Analí Merino Pineda, de 24 años de edad, es otro, ella salió de la ciudad de Puebla para dirigirse a Tecamachalco, fue vista por última vez el 7 de octubre en el barrio de San Juan, y posteriormente ya no se supo más de ella.
Esta joven de 1.68 de estatura, de complexión delgada, de cabello castaño lacio oscuro, de tez morena, cara ovalada, frente amplia, ojos cafés, labios delgados y brackets.
Los familiares de esta joven acudieron también a la FGE para presentar la denuncia por su desaparición y también a través de redes sociales han solicitado toda la ayuda posible para poder localizarla.
En ambos casos los familiares están desesperados por encontrarlas, han solicitado a través de todas las redes sociales la colaboración para poder saber de su paradero.
Son sólo dos de las muchas desaparecidas en territorio poblano, por lo menos tiene uno de estos casos sus familiares albergan la posibilidad de volver a encontrar, en el caso de Nayeli sólo esperan encontrar su cuerpo.
Mientras esto sucede autoridades municipales del ayuntamiento de Tecamachalco donde se dieron las dos desapariciones, le siguen jugando al informe municipal, a las reelecciones, incluso a la persecución de diputaciones.
Los demás no les interesa.
Nos vemos cuando nos veamos.