Justo en los momentos en que el estado de Puebla, para ser precisos, en la capital, el número de detenidos por posesión de drogas a tenido un aumento considerable, el movimiento 4:20 de hombres y mujeres, en su mayoría jóvenes, que promueven la legalización de la marihuana para uso lúdico, realizaron una manifestación en pleno zócalo de la ciudad.
La manifestación, además de pedir la legalización del consumo del cannabis tiene que ver con la persecución de fumadores por parte de cuerpos de seguridad, que se han ido a los extremos, sino los detienen por la posesión y les anexan otro poco más de sustancia, entonces los extorsionan.
Y es que en Puebla los grupos que se dedican al tráfico de drogas, además de marihuana, son considerados de los más perseguidos por el Estado, por ser los principales generadores de violencia, seguidos por el robo de hidrocarburos y de otros delitos federales.
Es por este motivo que la atención a delitos considerados cómo contra la salud, son en estos momentos una prioridad para las corporaciones de policía, que han dejado un saldo de más de dos mil detenidos, además del aseguramiento de una considerable cantidad de drogas.
De hecho fumar marihuana en vía pública constituye una falta administrativa que está a sólo unos gramos, por aquello de la cantidad, que se castiga con multa o con horas de arresto; sin embargo, los números de detenidos por esta falta han disminuido y el número de sospechosos de narcomenudeo han venido en aumento.
Y es que en la actualidad si alguno de estos fumadores es sorprendido por algún elemento policiaco, extrañamente, como la multiplicación de los peces, pasa de tener una bolsita a un kilo o a unos carrufos y en casos extremos hasta dosis de otras sustancias como cristal o cocaína, además de heroína.
Existen casos, muchos, de policías que se dedican a rondar la periferia de universidades, además de barrios y colonias, para buscar a fumadores de marihuana, para que se "mochen" con una lana, ante la amenaza de ser detenido incluso "cargados" con más droga, si se llegan a negar.
Todos los días los medios de comunicación locales reportan las detenciones de hombres y mujeres, incluso menores de edad, impostación de considerables cantidades de drogas, que se dice les fueron aseguradas, cuando se dedicaban a la actividad de la venta por narcomenudeo, aunque la gran mayoría de estos casos los sospechosos no son presentados junto con un posible comprador o vicioso para darle forma al delito.
La marcha realizada este día por decenas de jóvenes que piden se legalice el consumo de la marihuana, es sólo el primer aviso de otras presiones a futuro como ocurre en la Ciudad de México, frente a la Cámara de Senadores, desde donde hace ocho meses permanece un espacio de tolerancia para consumir marihuana.
La pregunta es: ¿qué es lo que pasaría en la ciudad de Puebla, sí como señal de resistencia es colocado un espacio de tolerancia para consumo de cannabis?
¿Los consumidores serían detenidos por la policía?
¿Les permitirían la siembra en espacios públicos?
¿Los dejarían llegar con su propia marihuana para fumar?
Todas estas preguntas son retóricas para el gobierno estatal y municipal, porque de ser detenidos se estaría considerando como un caso de represión, lo que daría pie a un conflicto de tipo político.
¿Usted qué opina?
Nos vemos cuando nos veamos.