Así de simple: que la Fiscalía General del Estado (FGE), logre una sentencia condenatoria en contra de Ricardo F. C, por los delitos cometidos en agravio de las mujeres que han tenido la mala suerte de ser sus parejas sentimentales.

La petición fue hecha en el marco del Día Internacional de la Mujer y justo cuando Ricardo F, a través de sus propios medios envía mensajes amenazantes de que va a salir en cualquier momento y de que se va a vengar.

¿De quien?

Son varias las mujeres que acudieron en su momento a la FGE para presentar denuncias por maltrato en contra del Junior, que presume tener mujeres  y relaciones en el Poder Judicial del Estado de Puebla.

Los relatos de golpizas, vejaciones, amenazas, son del todos conocidas. Ricardo se encargó de que sus redes sociales fueran sus propios diarios, donde denostó no sólo a sus parejas, sino además dijo que a las mismas autoridades las "puede comprar".

¿O ya compró?

No hay que hacer mucha aritmética como para demostrar que la autoridad estaba comprada, de hecho la detención de este personaje obedece a dos razones importantes.

La primera fue la presión hecha por la Diputada de la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México, por el Partido Verde Ecologista de México, Alessandra Rojo de la Vega, en torno al caso de violencia en agravio de Kemly “N”, y después a la directa intervención del Gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, quien dijo que ya estaba bien, que detuvieran al presunto agresor.

Pero Ricardo, parece que aún no entiende porque está preso, sigue pensando que en cualquier momento le van a abrir las puertas de par en par del penal de San Miguel para que salga, con las consabidas disculpas de quien lo acusó, quien lo investigó y quien lo detuvo.

Y entonces sigue enviando información negativa desde su bunker no tan privado, de que va a salir para "hacer cuentas".

Y entonces las víctimas o algunas de ellas, decidieron utilizar este medio para enviar un mensaje al Poder Judicial, a la Fiscalía del Estado, para que no dejen salir a un misógino en potencia, que en cualquier momento se puede convertir en un criminal, porque para feminicida le ha faltado poco.

¿Será también que nadie lo ha investigado a fondo?

La petición de Puebla es muy simple

Que se haga justicia.

Que Ricardo no se vaya a convertir en el Félix Salgado de Puebla.

Nos vemos cuando nos vemos