Al cumplir tres años de haber ganado las elecciones de 2018, el presidente Andrés Manuel López Obrador nos recetó uno más de sus innumerables “informes”, donde al igual que en los anteriores prevalecieron, para decirlo de manera políticamente correcta, las afirmaciones no verdaderas o en términos comunes: mentiras.

En promedio, en cada una de las 641 mañaneras, los mexicanos escuchamos 90 “afirmaciones no verdaderas”, y del 3 de diciembre de 2018 al 30 de junio de este año, se han contabilizado 56 mil 181 mentiras.

Si el presidente está tan interesado en auditar a los medios y hasta le destinó una sección de sus conferencias a exhibirlos, bien haría en poner el ejemplo y eliminar o de perdida reducir, la cantidad de falsedades que pretende imponer desde Palacio Nacional.

Anoche, en Destrozando la Noticia, hicimos un análisis de algunas de las afirmaciones que despiertan cólera e indignación por el exceso de cinismo con el que fueron pronunciadas. 

La cuarta deformación

Se han presentado signos alentadores de las crisis sanitaria y económica”, dijo sin vergüenza el presidente. ¿De verdad? Después de medio millón de mexicanos muertos durante la pandemia y con 12.5 millones de personas que perdieron su fuente de ingresos, los dichos sobre que ya se sienten los efectos de la recuperación, resultan insultantes.

Sabemos que su gobierno en poco o nada ayudó a mantener los empleos, tanto así que en alguna ocasión aclaró que prefería que quebraran las empresas antes que apoyarlas, sin entender que cada negocio quebrado representa que decenas de familias se queden sin ingresos.

Respondimos a tiempo, levantamos el sistema de salud que estaba en ruinas, no titubeamos en destinar recursos” ¿Pues de qué país habló AMLO?, ¿A tiempo, cuando se estiró al máximo el semáforo naranja para privilegiar las ventas decembrinas que resultaron en las muertes de enero?, ¿A tiempo, cuando la pandemia estaba llegando y en lugar de poner el ejemplo salía en videos a pedirnos que saliéramos a comer en restaurantes y que nos abrazáramos? Del uso del cubrebocas, mejor ni hablamos, es la hora que no se atreve a reconocer que es necesario para evitar más contagios.

Además no hubo masacres, no se desató la violencia” ¿No? Y entonces cómo debemos llamar a los más de 14 mil homicidios que se registraron en este primer semestre de 2021, porque muchas de estas víctimas fallecieron en eventos que sí encuadran en la definición de masacres. Y del asesinato de candidatos ni hablamos.

En resumen, el “informe” de AMLO nos mintió en salud, en economía y en inseguridad, tres rubros que día con día empeoran la calidad de vida de los mexicanos.

Al cierre

Y si usted cree que el lopezobradorismo ya va de salida déjeme darle una mala noticia, anoche en el Auditorio Nacional, los gritos de “presidenta, presidenta” demostraron que la consentida de AMLO podría perpetuar la corriente… a menos, claro, que los mexicanos despertemos de esta pesadilla, la oposición presente buenos perfiles y con nuestro voto los saquemos de la presidencia en 2024, año que no está tan lejos.