El interés por adquirir una vivienda continúa al alza en México, y es que aún con las afectaciones económicas por la pandemia, el país logró mantener la compra de vivienda a crédito a lo largo de los últimos meses.
Esto de acuerdo con las cifras de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores que muestran que en el décimo mes del año, el saldo de la cartera vigente de los créditos hipotecarios se situó en un billón 37 mil millones de pesos, lo que representó un incremento de 3.1 por ciento respecto del mismo mes de 2020.
Esto también se refleja en datos del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) y que, en su Reporte Económico Trimestral, correspondiente al periodo julio-septiembre de 2021, destaca que en el mercado hipotecario, nuevamente se reportan cifras positivas.
Con la pandemia por covid-19 se aceleró la preferencia de vivienda sustentable pero no se trata de una moda, sino que llegó para quedarse.
El mercado en el ramo de los bienes raíces afirma que las personas buscan cada vez más espacios que, si bien aporten comodidad para el teletrabajo, también se busca el contacto con el medio ambiente.
Llegó para quedarse sin temor a equivocarme. Las energías sustentables no son una moda, las energías sustentables son una necesidad y también van a existir mejores accesos a que puedas comprar vivienda de este tipo conforme la tendencia se vaya volviendo parte de tu vida.
Tenemos que replantearnos que la construcción de vivienda sustentable es algo que ya está en la mira de los desarrolladores, ya que el mercado cada vez demanda más este tipo de espacios habitacionales, que además cuenten con las comodidades para trabajar de manera remota.
La sustentabilidad es algo que ya está aquí para quedarse, no es moda. Igual y se convirtió, pero ya se va a quedar. A todos nos preocupó y nos hicimos más conscientes de nosotros mismos, primero con el Covid-19 y después también con el medio ambiente. Esto nos hace en conjunto ser más conscientes y preocuparnos por él.
La BMV, como la Bolsa Sostenible de Latinoamérica, ha venido impulsando fuertemente el desarrollo de los bonos verdes, sociales o sustentables y el apetito creciente de estas emisiones son prueba de que la estrategia viene encaminada y alineada con el interés de las empresas más importantes de México.
Buena noticia
A finales de septiembre pasado, Fibra ECO hizo público sus planes de listado en Bolsa. Con su lanzamiento estima captar 80 millones de dólares (alrededor de tres mil 700 millones de pesos mexicanos).
Este será el primer vehículo de inversión de impacto ambiental en México, por lo que su propuesta es adquirir edificios en arrendamiento para enverdecerlos, al aplicar eficiencias en su operación, realizar actualizaciones con la implementación de nuevas tecnologías y logrando su certificación EDGE.