A riesgo de convertir esta columna en un espacio de mascotas (ayer hablamos de la jubilación de perros al servicio municipal) hoy quiero referirme al video que se hará viral, donde un cachorro blanco corre libremente por las pistas del AICM.  

Más allá de la risa que provoca la astucia de la mascota para evadir la captura, la escena nos refleja la falta de controles de seguridad que cada día son más evidentes en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.

Tras la puesta en marcha del “otro aeropuerto”, el de Santa Lucía, el gobierno ha hecho de todo para tratar –por las buenas y por las malas- de hacer despegar al capricho presidencial.  

Pero se les dijo desde un inicio que no era un proyecto viable.  

Y tras ser cuestionado por el “decretazo” con el que se pretende obligar a las aerolíneas a tener más vuelos en el AIFA, Andrés Manuel reflejó nuevamente los problemas tan grandes de comunicación que existen en su gobierno.  

Apegado a su guión, López Obrador trató de sacudirse el autoritarismo y dijo que desconocía el decretazo y de pasó agregó una más de sus aseveraciones falsas, mentiras pues. 

El reordenamiento del espacio aéreo en la zona metropolitana, ese que ahora dicen que no existe, se ha convertido en un riesgo mayúsculo.  

Incidentes como la falta de combustible en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles o el sucedido el sábado por la noche, donde dos aviones de Volaris estuvieron a punto de “chocar” son claras advertencias de que las cosas no están bien.  

Si la 4T insiste en negar los hechos, en reconocer lo que las leyes de la física demuestran y en general, rechazando que su necedad ha traído una complicación enorme, que ahora deben resolver, lo único que ocasionará es que se repita una tragedia como la de la línea 12 del Metro.  

No importa que después culpen a los neoliberales o a quienes quieran, los testimonios y las alertas están prendidas desde hoy, estamos a tiempo de evitar la muerte de personas.  

¿Atenderán el problema o seguirán escondiendo la cabeza como las avestruces?

Veremos y diremos.

Alertas en Puebla

A espera de conocer la mecánica de los hechos y de que se esclarezcan los crímenes, la localización de tres cuerpos en Tlaxcala que corresponderían a los jóvenes desaparecidos la semana pasada en Misiones de San Francisco, se suma a la larga lista de masacres que hacen mella en el estado.  

Aunque se entiende que erradicar o disminuir los hechos delictivos es un proceso multidisciplinario, complejo y tardado, el reclamo de la sociedad por vivir en un estado seguro es urgente.  

Ayer mismo, antes de las 6 de la mañana, una reportera logró evadir un “levantón” en la junta auxiliar de San Pablo Xochimehuacan.  

En su relato, además de la recreación de los hechos, Leslie Mora refleja el miedo que sentimos los poblanos al salir a la calle.  

Urge que nuestras calles estén más iluminadas, que los rondines de las patrullas para disuadir a los delincuentes sean más constantes y que los sistemas de alertamiento funcionen antes de que nuevos casos como el de Sandra Elizabeth continúen multiplicándose.