Como se los adelanté, ayer participé en la Cumbre Internacional del Hábitat de América Latina y El Caribe en la mesa titulada: Medios de Comunicación y la Nueva Agenda Urbana.
En ella periodistas y comunicadores del país hablamos sobre los retos para informar y sociabilizar los 22 temas que abarca la Nueva Agenda Urbana (NAU) y los 17 Objetivos de Desarrollo Sustentable conocidos como ODS.
Enfaticé que lo primero es que los medios podamos conocer al interior de nuestras redacciones y con nuestros reporteros a qué nos referimos cuando hablamos del periodismo urbano, cuáles son los problemas que enfrentan las Megalópolis y en general qué es la NAU.
Partiendo de ello será más fácil difundir los objetivos y metas de la Nueva Agenda Urbana. También contaremos con más elementos para cuestionar a los políticos y gobernantes sobre las acciones que ayuden a cumplir con estos lineamientos que no son inventos de un presidente u otro, son internacionales.
“Entre el 5 y 7 por ciento de las personas conocen los puntos 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), y se calcula que el 2% conoce lo que es la Agenda Urbana a grandes rasgos, los periodistas debemos trabajar en el conocimiento de la Nueva Agenda Urbana”.
En Guadalajara, junto a influencers como Lord Molécula externé: “el periodismo tiene que saber cuestionar, tiene que hacer una crítica profunda y de fondo. El periodismo de rodillas no sirve... Cuando se tiene enfrente a un político desde el presidente hasta el que se guste y se le alaba, eso no es periodismo, podríamos en el mejor de los casos decirle periodismo militante. Si tú tienes la oportunidad hay que cuestionar al político en lugar de tomar el papel de la zalamería, de la lambisconería, que en el periodista tendría que ser un motivo de vergüenza”.
Mis participaciones y críticas ante la división social del país que cada día se alimenta desde la mañanera generaron muecas y gestos de molestia entre los participantes de la mesa, pero como lo dije, tenemos que cuestionarnos.
Cambios necesarios
En ese sentido recalqué que la NAU se creó antes de la pandemia, es decir, prácticamente en otro mundo, por lo cual ahora se debería hacer una actualización en donde también se incluyeran temas como la inseguridad, la salud, la educación, la migración y la resiliencia que hemos enfrentado con el Covid-19.
El reto es enorme y urgente. Se calcula que para el año 2050, 75% de los habitantes del mundo vivan en las llamadas Megalópolis; actualmente la mitad de los habitantes estamos en alguna de estas regiones.
También hubo espacio para destacar el esfuerzo de ONU-Habitat que ha lanzado la Academia de Periodismo Urbano (UJA por sus siglas en inglés) para capacitar a periodistas en los temas sociales y económicos que afrontan las grandes ciudades.