Mientras el municipio de San Martín Texmelucan vive uno de los momentos de mayor inseguridad, con constantes asaltos y ejecuciones, la presidenta municipal Norma Layón, sí está bien segura.
Inmediatamente después de su reelección, adquirió una camioneta de lujo y después la mandó a blindar, lo que es de todos conocido.
Claro, todo lo hizo con recursos del erario y en medio de constantes recortes, incluso a la seguridad.
Pero no tuvo empacho en pagar, en primera instancia, más de un millón 670 mil pesos por una camioneta Suburban, con todo y quemacocos, para poder trasladarse, siempre custodiada por lo menos por tres patrullas.
La copia de la factura emitida el 28 de agosto de 2021, la obtuvimos mediante la ley de transparencia.
Lo increíble, es que, en ese mismo tiempo, se adquirieron dos patrullas modelo Frontier de la marca Nissan, de poco más de 399 mil pesos cada una, como lo comprobamos también en sendas facturas.
O sea que con la camioneta que quedó a cargo de la alcaldesa que fue pagada de contado, se pudieron haber adquirido por lo menos cuatro unidades de policía más.
Pero la gastadera no acaba ahí.
Después de pagar de contado la unidad de lujo, la mandó a blindar.
Para eso gastó de las arcas municipales otros dos millones 200 mil pesos.
O sea que se gastaron más recursos por la blindada, que, por la misma unidad, ya de por sí de lujo.
El blindaje fue mediante adjudicación directa con la empresa Ballistic Technology S.A. de C.V.
O sea, en total se gastó 3.8 millones de pesos en el vehículo.
Con ese mismo dinero se pudieron comprar, al menos, 10 patrullas como las señaladas.
También esa cantidad de dinero es muy superior, por ejemplo, a los 2.3 millones de pesos que se gastaron en el tanque elevado de la junta auxiliar de Temaxcalac, el cual se cayó al siguiente día de inaugurado.
Al menos el blindaje le sirvió para las pedradas que recibió de pobladores, cuando acudió a ese lugar.
Lo cierto es que es notorio con este tipo de compras, que la prioridad no es la seguridad.
La Fiscalía General del Estado de Puebla difundió que de enero a septiembre de 2022 se registraron 45 homicidios dolosos.
De acuerdo con las carpetas de investigación, el año pasado se registraba un homicidio doloso cada 12 días en promedio, en este 2022, es uno cada seis días en Texmelucan.
Y ya ni hablemos de asaltos.
Claro, esa es la punta del iceberg.
La alcaldesa tiene observaciones de la Auditoria Superior del Estado (ASE) por un presunto daño patrimonial de 130.5 millones de pesos del ejercicio fiscal 2020, en su primer periodo de gobierno.
Por algo la inseguridad anda como anda en Texmelucan.
Claro tras una Suburban blindada, no se aprecia.