Mamá, no solo es una palabra, es el conjunto de letras que para todo ciudadano del mundo representa respeto, amor, cariño, comprensión, orientación e incluso es una figura intocable al ser la persona más sagrada en el entorno familiar, a un lado de nuestros padres.

Las madres representan la base de una familia, la unidad y sin ellas difícilmente se cuenta con orientación o bases sólidas que nos lleven a un punto definido de desarrollo y crecimiento personal.

El 10 de mayo es una fecha muy especial en México, es una oportunidad para reconocer la importancia que las madres tienen en nuestra sociedad, no solo en el ámbito familiar, sino también en la política, el emprendimiento y en toda la vida pública.

Las madres son el vínculo familiar y son una parte muy importante en la crianza de nuestros hijos y sobre todo, para nosotros los mexicanos son la base de la confianza, el respeto, el cariño y de una formación con principios, valores y ética.

Su papel va más allá de la esfera doméstica; las madres también son líderes en el ámbito político, empresarial y social, y juegan un papel fundamental en el desarrollo de nuestras comunidades.

En la política, las madres tienen una gran influencia; muchas mujeres han llegado a puestos de relevancia gracias a sus habilidades de liderazgo, su capacidad para construir consensos y su compromiso con el bienestar de sus comunidades. En México, contamos con ejemplos evidentes de mujeres que gobiernan las principales capitales de los estados y puestos de trascendencia en muchos ámbitos sociales.

Basta con solo voltear la mirada para reconocer a más mujeres que conjugan la responsabilidad de ser madres con el desarrollo profesional, tal es el caso de compañeras diputadas de la LXI Legislatura, así como secretarias del gabinete del Gobierno del Estado y además de ellas, presidentas municipales, sumado a un importante número de servidoras públicas, profesionistas, emprendedoras y en general, todas aquellas que entregan su vida a sus familias, a su trabajo y su profesión.

En el ámbito empresarial, las madres también tienen un papel preponderante, muchas mujeres han creado sus propias empresas, generando empleo y contribuyendo al desarrollo económico de municipios, estados e incluso naciones enteras. Las madres empresarias son un ejemplo de perseverancia y determinación, ya que muchas de ellas han logrado equilibrar el cuidado de sus hijos con el crecimiento de sus negocios.

En la vida pública, las dadoras de vida son un ejemplo a seguir, su dedicación, sacrificio y compromiso con sus hijos y sus comunidades son una inspiración para todos nosotros; además, las madres son las principales promotoras de valores como la solidaridad, la empatía y la responsabilidad, que son fundamentales para el desarrollo de una sociedad justa y equitativa.

Como hijos, padres, hermanos, abuelos, tíos, invito a valorar el importante papel de la mujer como progenitora; es sencillo hablar sobre tener una familia, pero mantenerla unida y desempeñar funciones alternas en la vida productiva, o llevar las riendas al cien por ciento en el ámbito doméstico, no es cosa fácil.

Mis respetos a la labor de cada una de ellas, a la entrega, el esfuerzo, empeño y constancia que otorgan en cada casa, en cada espacio que con su sola presencia lo convierten en un entorno de tranquilidad y seguridad.

Sin duda su contribución al bienestar de nuestro estado y nación es invaluable. Por eso, hoy y siempre, celebremos y honremos a todas las madres, no solo en su día sino siempre.