Los poblanos llevamos más de dos meses padeciendo una enorme contaminación visual. Entre los espectaculares, que se reprodujeron como hierba tras las lluvias del verano, y las miles de bardas, es imposible recorrer un kilómetro sin tener que soplarse el nombre de algún político.

El tema, ampliamente manoseado, pasó por los dimes y diretes del IEE, del tribunal electoral, de los alcaldes metropolitanos y hasta de los partidos políticos, como los panistas que intentaron en vano despintar una barda.

Ante semejante caos y la falta de prudencia de las corcholatas que insisten en señalar que ellos no pintan las bardas y que éstas aparecen espontáneamente por sus seguidores, el gobernador Sergio Salomón se vio en la necesidad de anunciar un decreto para suplir la laguna legal.

A ese anuncio se sumó el presidente del Congreso, Eduardo Castillo, quien afirmó que respaldarían el decreto, aunque legalmente no se requiera de ello.

Y ya que está la mesa puesta, la presidenta estatal de Morena sale a tratar de poner el orden. Ayer les pidió a todas y todos los interesados en obtener alguna candidatura o “ganar la encuesta” que por favor retiren sus pintas.

Olga García no explicó si la negativa de los actores sería razón suficiente para descalificar a los competidores o cuál será la sanción a quien insista en mantener las bardas con su respectivo nombre.

Y aunque nadie se cree esa ilusión de que los seguidores son quienes por cuenta propia han decidido rayonear sus fachadas, habría que preguntarnos quién “borrará” esas bardas.

Por lo pronto, una voz más trata de frenar la contaminación visual que nos afecta a todos y que francamente no beneficia ni a los suspirantes.

¿Bastará esta nueva advertencia o las corcholatas locales se pasarán el tema por el Arco del Triunfo?

Veremos y diremos.

Monreal ventila acuerdos

Durante su visita a Puebla, Ricardo Monreal terminó por ventilar algunos temas tratados con el gobernador, Sergio Salomón.

Además de reconocer que en la entidad se ha trabajado para tratar de mantener la equidad entre las corcholatas nacionales, el senador soltó: al gobernador le tengo respeto, incluso cuando le planteé algunas cosas de personas que estaban detenidas fue muy anuente en la revisión. Sé que algunos ya han salido, todavía faltan más.

En otras palabras, confirmó uno de los rumores que se expandieron ante la salida de muchos de los autodenominados “presos políticos del barbosismo”.

Lo que es un hecho, es que el gobernador sigue trabajando en la reconciliación de Puebla y los poblanos.