Sólo se necesitaría de 525 años para que el Trenecito de Rafael se pagara. Sí, por irónico que suene, se debía tener funcionando el elefante blanco durante medio siglo, para que la inversión inicial se pudiera recuperar.

Lo advertimos en las páginas de Intolerancia Diario, en julio de 2019, la ocurrencia de Rafael Moreno Valle además de no resultar como un verdadero medio de transporte ni como una atracción turística, era económicamente inviable.

Incluso, hace una década, en septiembre de 2013, les adelanté en esta columna, que el Señor de los Cerros había decidido que a su Disneyland, le hacía falta un trenecito.

Y aunque el proyecto original tuvo que sufrir una fuerte modificación porque era incosteable pagar los derechos de vía para conectar la Estrella de Puebla con la Exhacienda de Chiautla, al final el capricho se impuso y hoy los poblanos tenemos un elefante a mitad de la sala, que simplemente no es rentable.

Contracara

6 de septiembre de 2013

…Lo increíble de este asunto es que, aunque usted no lo crea, en la cabeza del gobernador ronda una de las dos ideas que hoy les presento como propias.

No se rían y tómenlo con la seriedad del caso, porque en Casa Puebla se trabaja en el proyecto de una de estas dos ideotas, para sumarse a la Puebla de fantasía que el Señor de los Cerros nos quiere heredar a todos los poblanos.

Les dejo de tarea adivinar cuál es el nuevo sueño morenovallista: si la construcción de un súper acuario con especies provenientes de nuestros veneros acuíferos o instalar un tren bala que una a la Estrella de Puebla con la Exhacienda de Chautla.

Total, qué más da que Puebla tenga el índice más alto en cuanto a pobreza extrema de todo el país, si podemos tener el parque de diversiones más grande del mundo.

Si yo fuera Disney, me pondría a temblar.

Como ya se vio, las facturas de los caprichos morenovallistas continúan golpeando las finanzas públicas incluso una década después de su planeación. Ese es el verdadero riesgo de construir obras “para la foto”, como las que Rafael se empeñó en realizar.

Es cuanto, Dr. Martínez

Extremadamente relajado, José Antonio Martínez pronunció sus últimas palabras como secretario de Salud en la conferencia de prensa mañanera de ayer jueves.

Es cuanto, gobernador” fue lo último que dijo tras haber dado las recomendaciones para combatir la propagación del dengue, informar que se acabaron las vacunas Abdala y el reporte Covid.

Al doctor se le reconoce la enorme fortaleza con la cual enfrentó la pandemia, en más de una ocasión contraviniendo las puntadas de AMLO y López-Gatell, como cuando indicó la necesidad de utilizar el cubrebocas como medida de protección y para cortar las cadenas de contagio.

Fue también el impulsor de proyectos como la reconversión de hospitales durante los meses de mayor auge de la pandemia y más tarde, de la utilización del Quirófano Itinerante, un proyecto con el cual se pudieron realizar cirugías a poblanos que se encontraban alejados de los centros de salud, clínicas u hospitales.

Más allá de las porras que le organizaba al exgobernador Barbosa en sus giras, las fotografías que más permearon fueron las que dieron constancia de su pasión médica al acudir al Centro Expositor a colocar vacunas de manera masiva.

Es cuanto.