Pese a las protestas iniciales de los vecinos de la zona, el tiempo parece estarle dando la razón al gobernador, Sergio Salomón, quien apostó por hacer una intervención mayúscula en la zona de Angelópolis y así agilizar el tránsito.
La prohibición de las vueltas a la izquierda sobre la Vía Atlixcáyotl y la construcción del Distribuidor Vial serán complementadas con el retiro -en próximos días- de la que aún queda en la entrada a La Vista.
A diferencia de hace medio año, hoy se puede recorrer la Atlixcáyotl en siete minutos y salvo ese único “retorno” señalado, ya no se generan cuellos de botella para quienes utilizan la vialidad.
¿Y las desarrolladoras?
Una vez que el gobierno ha realizado su tarea habremos de esperar a que las desarrolladoras de Lomas de Angelópolis, que bastante se han beneficiado con los conjuntos y comercios que han construido y vendido en la zona, sean socialmente responsables, pongan su granito de arena y ayuden a construir alternativas para los tres accesos, que son los puntos de conflicto.
Las laterales y los puentes que actualmente permiten la movilidad ya se encuentran rebasados, de ahí la necesidad de mejorar las condiciones de las arterias.
El mal necesario
Estas acciones de mejoramiento de entradas y la entrega del nuevo distribuidor vial deberán estar acompañadas de un trabajo intenso de la Secretaría de Movilidad y Transporte para regularizar a los llamados taxis pirata.
Este “mal necesario” tiene “horas pico” en donde se logran apreciar las largas filas de usuarios que necesitan tomar esos inseguros vehículos, a falta de un transporte que los lleve de sus casas a las escuelas, trabajo o servicios.
La presencia de los taxis piratas formados en algunas de las “bases” pareciera una burla a la autoridad, es imposible que las unidades de supervisión de la SMT no vean los vehículos que esperan ser abordados.
Estas estampas también reflejan el requerimiento de nuevas rutas de transporte público, legales, que realicen, con eficacia, el mismo recorrido que estas unidades. Ya se ha visto, por años, que la demanda existe.
La propuesta no es desaparecer un servicio que se requiere, lo que se pide es que esas u otras unidades se regularicen para dar el servicio de Valsequillo a Cholula, que es donde se concentra la mayor cantidad de viajes.
Sin duda, la legalización de estos taxis aunada a la entrada en vigor de la Línea Metropolitana permitirá que líderes de Antorcha Campesina o la 28 de Octubre dejen de hacer su agosto y burlarse de la autoridad. Sólo así se logrará un beneficio integral.
¿Darán el manotazo en la mesa?
Veremos y diremos.