¡Qué tranza, mis valedores! Hoy toca hablar de un personaje que se aferra más que luchador rudo a su máscara rota: Alejandro Ramírez Ulloa, alias “El Muñeco”, quien aunque ya lo sacaron de la Policía Auxiliar de Puebla, sigue aferrado a la cuerda, tratando de hacer maroma pa’ quedarse en el puesto.

El problema es que no lo corrieron nomás porque sí. Hay denuncias, mi mai, y bien graves.

Pos resulta que aspirantes a la Policía Auxiliar denunciaron que presuntamente les cobraban desde 2 mil hasta 30 mil del águila para entrar a la corporación. O sea, ¡como si la seguridad fuera un negocio y no un servicio público!

Pero aquí viene lo bueno. Según mi chismoso de barrio policíaco, el jurídico de la Policía Auxiliar, Arturo Canaán Pérez, en vez de enfocarse en limpiar la casa, anda más preocupado en defender a Ramírez Ulloa. Oficialmente, Canaán no es su abogado, pero parece que sí le está llevando la esquina porque ahora amenaza con demandar a la SSP y al gobierno del estado por despido injustificado.

¡Tómala!

No solo no se quiere ir, sino que además quiere que le pidan perdón con alfombra roja.

La SSP ya le puso el radar

Aunque el Muñeco patalee, Francisco Sánchez, Secre de Seguridad Pública (SSP), así como sin querer la cosa avisó ayer que se viene una investigación formal contra él.

No es nomás un rumor de pasillo, ahora la Dirección de Asuntos Internos ya le puso lupa a su gestión para ver si las denuncias tienen fundamento.

Y justo después de que lo corrieron, el góber anunció que va a reestructurar la Auxiliar. No fue una estrategia previa, pero sí parece que en Casa Aguayo vieron la oportunidad de sacudir el árbol y ver cuántas manzanas podridas caen.

Porque aquí la pregunta es clara: si el Muñeco hacía sus movidas con cobros a aspirantes, ¿realmente era el único? O ¿vamos a descubrir que hay más gente embarrada?

La investigación dirá hasta dónde llega la red, pero de entrada, lo que ya sabemos es que Ramírez Ulloa no quiere irse sin pelear.

Si la SSP realmente quiere limpiar, esta es la oportunidad perfecta pa’ demostrarlo. No basta con sacar a un personaje polémico, tienen que asegurarse de que las viejas prácticas se acaben de una vez.

Porque la neta, Puebla no necesita más policías que vean la corporación como una caja registradora. Si alguien quiere hacer negocio, que monte su changarro en otro lado, porque los poblanos necesitamos seguridad de verdad, no carteles de cobro disfrazados de mando policial.

Así que ahí lo tienen, mis valedores.

Ahora falta ver si la SSP cumple con su palabra y saca los trapitos al sol, o si este personaje termina logrando un regreso milagroso.

Aquí estaremos atentos, porque en el cuadrilátero de la política, nunca falta el que quiere aplicar la rendición fingida.

¡Nos leemos en la próxima caída, mi mai!