Yadira Lira dejó la secretaría de Turismo. Lo hizo con un ambiguo reconocimiento a su trabajo por parte del gobernador Alejandro Armenta, quien soslayó que todos los servidores públicos, hasta él, han tenido aciertos y errores. 

La salida de Yadira podría notarse como un aviso cantado, no sólo por aquel reclamo público que realizó el propio gobernador en febrero pasado, si no porque se trata de una deportista que, como muchos otros, ingresaron al servicio público sin tener conocimiento de lo complejo que resulta la administración. 

No es lo mismo ser borracho que cantinero. La administración pública, además de un montón de paciencia y burocracia, también implica mucha política y diplomacia. Artes que no siempre se logran aprender en las primeras semanas. 

El turismo en Puebla, bajo el gobierno de Alejandro Armenta, pretende ser esa industria sin chimenea que pueda detonar las economías locales. Potencializar el turismo regional requiere de mucha creatividad y de un increíble balance entre la promoción y el cuidado de las comunidades para evitar que la gentrificación termine por arrasar con las bellezas de nuestro estado. 

Yadira, como Norma Layón, entraron digamos que con calzador al gabinete, justo después de que se supo que Olga Lucía Romero Garci-Crespo se quedaría al frente de Morena. Es decir, los perfiles no estaban alineados para esas responsabilidades y hoy vemos las consecuencias. 

Podríamos decir que Lira simplemente estuvo en el lugar incorrecto. Nadie duda de su disciplina o de otras cualidades que le han permitido ser medallista, sin embargo, como dice el dicho: zapatero a tus zapatos. 

El otro lado de la moneda

En contraste con los casos de Yadira y el de Norma Layón que no termina de poner orden en RUTA y en Carreteras de Cuota, tenemos a otras mujeres que le han dado grandes resultados a la administración. 

Silvia Tanús, quien adelantó en Informe Una En Punto que pondrá todo su empeño al frente de la Secretaría de Movilidad y Transporte porque considera que será su último empleo en la administración pública, ha mostrado su experiencia, la mano firme y a la vez la conciliación y la apertura. Es sin duda, reflejo de una persona que conoce desde las entrañas el servicio público. 

Sin tanta experiencia, pero igualmente dando resultados encontramos a Rebeca Bañuelos Guadarrama, actual Secretaria de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial de Puebla. Sin duda su labor será puesta a prueba con temas como la verificación e incluso el saneamiento del Río Atoyac. 

La juventud no está peleada con los resultados. Con 22 años, Michelle Talavera Herrera, sacó la casta y logró la organización y la realización de la Feria de Puebla 2025. Antes, eventos como el Festival Navideño Por Amor a Puebla, ya le habían enfrentado con la complejidad de la organización de actos multitudinarios. 

En ese mismo renglón colocamos a Natalie Hoyos López, quien encabeza el Sistema de Información y Comunicación de Puebla. Su presencia tanto en las transmisiones a control remoto como en las diferentes áreas operativas del SICOM ha encontrado un balance con el tedioso, pero necesario, tema administrativo, sin olvidar, las múltiples reuniones o eventos en los que se le suele ver.

En resumen, la salida de una integrante del gabinete servirá para darle oxígeno a una de las Secretarías de mayor importancia en este sexenio. 

¿La o el próximo titular será alguien que entienda la complejidad de la administración pública?

Veremos y diremos.