Yo no he renunciado a nada, porque yo nunca tiro la toalla y menos en la defensa de las mujeres”, fueron las palabras que esta mañana compartió desde una transmisión en vivo en sus redes sociales la responsable del Centro de Justicia para Mujeres (CJM), Yeny Charrez Carlos, luego de que denunciara que personal del Órgano de Fiscalización Superior (OFS) y de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) se encontraban en las oficinas para dar cumplimiento a una supuesta renuncia de su cargo.

Con un llamado a la gobernadora del estado, Lorena Cuéllar Cisneros, la también activista manifestó públicamente que se le está obligando a renunciar, derivado a que en días pasados evidenció presuntas irregularidades en el Centro de Justicia, respecto a los recursos federales avalados por la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres.

“Señalé las irregularidades con los subsidios federales y tengo toda la documentación que lo sustenta; solicité de lo que está pasando en el edificio que se está construyendo en el Centro de Justicia, porque en cuanto vieron todas las irregularidades que señalé no quisieron darme más información”.

No sólo aprovechó para denunciar una serie de supuestas inconsistencias con respecto al CJM y los recursos federales del Conavim, también, presuntos contratos a personal que no cumple con el perfil para atender a las mujeres, así como salarios desproporcionales y mal aplicados.

Acusó que todos, incluyendo la gobernadora, tienen conocimiento de las situaciones en el Centro de Justicia, y de carpetas de investigación “desaparecidas” de casos de mujeres, por parte de la Procuraduría General de Justicia.

Afirmó que no “tirará la toalla”, no renunció y solicitó a la Comisión Estatal de Derechos Humanos asistir para verificar la supuesta renuncia, en presencia de la subprocuradora, María Azucena Jiménez Pacheco, quien encabezó la comitiva que asistió a dar cumplimiento.