Con motivo del Día Internacional de la Discapacidad, que se conmemora este 3 de diciembre, integrantes de la Asociación 100 X Tlaxcala, señalaron que en realidad no hay nada que celebrar.
La coordinadora del grupo ciudadano, María del Carmen Mazarrasa Corona reconoció que a pesar de que el 21 de julio de 2001 el Congreso del Estado apoyó la creación del Instituto Tlaxcalteca para Personas con Discapacidad, generado entonces como una causa ciudadana con la que se logró ayudar a cientos de personas, hoy ya no existe ni sus beneficios gracias a la decisión de la gobernadora Lorena Cuéllar quien ordenó su desaparición el 31 de diciembre de 2021, después de 20 años que el ITPCD ayudó a transformar la vida de miles de personas con discapacidad y sus familias
Con la decisión gubernamental, también se concretó la destrucción del parque “Kokonetzi”, que contaba con más de 80 juegos infantiles, todos ellos adaptados para niños y niñas con discapacidad.
Mazarrasa Corona recordó que con la creación del Instituto, el estado de Tlaxcala fue reconocido a nivel nacional como la entidad, donde se generaron las primeras políticas públicas de atención a personas con discapacidad, siendo el primer instituto en el país, convirtiéndose en ejemplo a nivel nacional.
Fue el primero en poner en marcha un modelo de atención social basado en los derechos humanos, más allá del modelo médico-asistencial que por muchos años fue aplicado.
Y lo que es peor es que la atención que actualmente se brinda a las personas con discapacidad son meramente asistenciales de salud, victimizándolas más, sin visualizarlas como sujetas de derechos y dejándoles en el olvido.
Por lo anterior, la agrupación que reúne a ciudadanos interesados en el desarrollo de Tlaxcala, afirmó que se requiere un modelo de atención basado en los derechos humanos, dónde se puntualice que las personas con discapacidad pueden contribuir a la sociedad en iguales circunstancias que las demás, pero siempre desde la valoración a la inclusión y el respeto a los valores esenciales como la dignidad humana, la libertad personal y la igualdad, que propicien la disminución de barreras físicas y de comunicación y den lugar a la inclusión social.