Emmanuel Ávila González, titular del Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE), reconoció que se requieren reformas electorales al término de cada proceso político, pues hay necesidad de adecuar las normas a realidades sociales.

“Recordemos que en 1996 cuando existía una gran reforma se decía que era la definitiva y la realidad es que no era así, por lo que tuvimos otra reforma”.

Destacó que a nivel nacional derivado a las modificaciones promovidas con respecto al Plan “B” existe un dilema por no poder aventurarse sin que se den certeza de los resultados a obtener, por lo que reconoció el retraso respecto para avanzar con el tema.

“Hay un dilema por el asunto del Plan ‘B’ que está digamos estancado y entiendo la labor de la legislatura al no aventurarse, había cerca de 10 a 12 temas de importancia que están parados en la SCJN y entiendo esa incertidumbre del Congreso local para hacer o no hacer ajustes”.

Pese a ello, adelantó que ya se encuentra con acercamientos con la Junta Local Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral (INE), para comenzar a trabajar rumbo a los comicios de 2024.

La propuesta

Previamente el diputado local por el PRD, Juan Manuel Cambrón Soria, presentó la propuesta de reforma electoral buscando aumentar el porcentaje de votación para representación proporcional y temas de paridad de género, así como lenguaje inclusivo, sin embargo, hasta el momento pocos son los avances que se tienen para concretar dicha reforma.

De igual forma, informó que el ITE continuará con la suspensión de la consulta hasta que existan los tiempos oportunos para completar la última fase, así como un avance por el Tribunal Electoral de Tlaxcala respecto a comunidades que impugnaron durante el ejercicio.

Emmanuel Ávila González, reconoció que existieron comunidades que presentaron una impugnación por no estar de acuerdo con la forma de realizar las encuestas por lo que pidieron al Tribunal se tome en cuenta una nueva forma de realizar la encuesta sin vulnerar sus derechos tanto de las comunidades que no quisieron participar como de quienes aceptaron.

Destacó que durante la consulta no existieron problemáticas ya que el ITE procedió de forma inclusiva.

“Ya que antes de diseñar la batería de preguntas se realizó una fase previa para conocer a la población y saber cuáles eran las inquietudes que predominaban con respecto a decisiones electorales”.

Añadió que de 94 comunidades que ejercen sus decisiones y presidentes por usos y costumbres, son 55 las que ya participaron en la consulta, mientras que aproximada 22 decidieron no efectuarla.

Mientras que el resto están en espera de la última fase del proceso de consulta, la cual consiste en el procesamiento de los resultados para su consideración en la elaboración final del proyecto de reglamento y su posterior aprobación por el Consejo General, la cual debió de haber sido concluida durante mayo, pero hubo impugnaciones, por lo que se determinó suspender el proceso.