Durante la madrugada del martes, granaderos y policías estatales de Tlaxcala desalojaron por la fuerza y quitaron de manera violenta a manifestantes sindicalizados que se mantenían apostados a las afueras del Palacio de Gobierno.
En días previos los agremiados al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) Sección 55, así como los Sindicatos “7 de Mayo” y “Justo Sierra”, entre otros, se manifestaron en calles de Tlaxcala capital y cerraron accesos principales a la ciudad.
Inclusive, la víspera también se impidieron el acceso al Registro Civil en el Centro Histórico, manteniéndose en plantón indefinido a las afueras de la sede del gobierno del estado.
Lo anterior, al demandar a la mandataria Lorena Cuéllar Cisneros garantizar los servicios de salud para los sindicalizados y frenar el nuevo esquema de Módulos Médicos de Salud Integral que se localizan en los municipios de Tlaxcala, Chiautempan, Apetatitlán, Apizaco y Huamantla, además, reclamaron que se privatice el servicio.
Ante ello, personal de Seguridad acudió al Palacio de Gobierno y retiró por la fuerza casas de campaña, lonas y carpas de los sindicalizados.
Por la mañana, policías estatales se apostaron en las inmediaciones del edificio estatal para resguardarlo y evitar que los manifestantes regresaran para continuar con sus movilizaciones.