El vocero de la arquidiócesis de Puebla, Felipe Pozos Lorenzini, sostuvo que el nombramiento del cardenal Jorge Mario Bergoglio hará que se mantenga una iglesia viva, e indicó que en el caso de América habrá de mantenerse la misión continental iniciada por el Papa Benedicto XVI. Además, reconoció que fue una sorpresa la designación.

En conferencia de prensa tras el nombramiento del papa Francisco, Pozos Lorenzini, en representación del arzobispo Víctor Sánchez Espinosa, indicó que se está dando un paso adelante al proceso evangelizador que se lleva a cabo en América Latina, después de la conferencia de Aparecida en el 2005.

Comentó que el nombramiento sorprende por tratarse del primer pontífice nacido en América, pero aclaró que los católicos deben pensar que el papa es para todo el mundo y no sólo para una región.

Indicó que ahora viene el compromiso de los católicos y creyentes para hacer su parte, que se cumpla con los principios de la fe y se actúe con responsabilidad.

Destacó la sencillez con la que actuó en su primer día de pontificado, e indicó que es el líder que se necesita en estos momentos por ser un hombre de fe.

Cuestionado acerca de que es el primer jesuita que está al frente de la iglesia, manifestó que esto muestra la universalidad de la iglesia.

Aseguró que nada ni nadie va a detener a la iglesia misionera, y descartó que por el nuevo pontífice haya cambios en el proyecto, ya que la iglesia latinoamericana tomó firmemente el documento para ir al encuentro de las comunidades de los pueblos, de las familias y los alejados.

Ante los fieles poblanos, pidió comprometerse con el llamado de Francisco I en la salvaguarda del tesoro de la fe, en la defensa de la vida humana desde su concepción hasta el ocaso natural.

Repican las campanas
Ayer, poco después de las 12 del día, las campanas de la Catedral repicaron en señal de júbilo y, a diferencia del 28 de febrero cuando renunció Benedicto XVI, el evento sólo se concentró en el templo principal, para los católicos, donde se celebraba una eucaristía con la asistencia de no más de 20 personas.

Indicó que, una vez hay nuevo papa, se va a organizar una misa con todos los sacerdotes de la diócesis para dar la bienvenida al nuevo pontífice.