Durante la sesión de más de nueve horas, senadores de la República aprobaron en lo general y lo particular el proyecto de decreto por el que se reforman y adicionan disposiciones a la Ley de la Industria Eléctrica. 

Con 68 votos a favor y 94 en contra se avaló la reforma a la industria eléctrica en términos en que el presidente Andrés Manuel López Obrador envió la iniciativa a la Cámara Alta.

Durante más de tres horas, partidos de oposición como PRD, MC, PAN y PRI, presentaron sus reservas, el bloque conformado por Morena-PES y PT desestimaron las argumentaciones y pasaron en los términos el dictamen. 

El bloque opositor acusó a los legisladores de Morena de haber seguido instrucciones del titular del Ejecutivo y de “haberse quedado en el siglo pasado”, pues consideraron que la contrarreforma eléctrica impulsará el uso de energías sucias. 

En este sentido, la panista Xóchitl Gálvez, colocó un moño negro en tribuna en señal del “luto” que vive México y agregó “nos vemos en la Corte”.

Una de las legisladoras de la Cuarta Transformación que votó en contra fue Nancy de la Sierra, pues pidió a sus compañeros asumir su cargo con respeto y evitar propagar la desinformación. 

"No podemos hablar de devolver nada al pueblo, cuando le quitamos un futuro sostenible. La prioridad no es fortalecer al sector privado y debilitar a CFE, sino que se produzcan energías limpias", dijo.

Por su parte, Germán Martínez Cázares, uno de los 14 senadores de Morena que interpuso reservas, las sostuvo y propuso la regulación de contratos en materia eléctrica para indemnizar a las personas en comunidades rurales que sean producto de las concesiones. 

"Mi reserva busca garantizar una contraprestación justa a los pequeños propietarios, a los comuneros o a los ejidos en los que se instalan estas grandes empresas. Y este fue un olvido del dictamen o de la minuta y eso también me motivó a votar en contra", explicó.