Las unidades son los mismos modelos de la ruta Dorados, que desapareció hace unos años y que circulaba sobre la 11 Norte-Sur, ruta que fracasó a pesar de que se le montó una infraestructura especial en los camellones para el ascenso y el descenso de pasajeros del lazo izquierdo.
La docena de autobuses, que el 1999 —fecha de su lanzamiento— eran los más modernos, contaban con tres puertas de acceso y descenso en la parte derecha y dos del lado izquierdo, contadores de pasajero y cobro electrónico, similares a las nuevas del metrobús. Las paradas de dichos autobuses, propiedad de Delfino Reyes Bocardo, conocido transportista, aún continúan en los camellones, fieles testigos del fracaso del proyecto millonario en la administración gubernamental de Melquiades Morales Flores.
Ahora la empresa que operará el metrobús estará integrada por 180 concesionarios del transporte público, aunque tampoco están definidos los esquemas de prepago, de acuerdo con datos de la Secretaría de Transporte.
Los autobuses convencionales —marca Mercedes Benz— están siendo acondicionados para el proyecto del metrobús de Puebla, impulsado por el gobierno estatal, unidades que circularán en lugar de los articulados. Algunas de estas unidades están estacionados en la agencia Mercedes Benz sobre la autopista México-Puebla, en el número 7522 de la colonia Ex Rancho Moratilla.
Los autobuses con motores a diesel con normas Euro5 y tecnología Buletec, tienen un costo alrededor de 1.5 y 3 millones de pesos, muy inferior a los 7.2 millones de un autobús articulado.
El fracaso
La ruta Los Dorados de la 11 Sur-Norte fue la primera troncal de la ciudad de Puebla; propiedad de la concesión era de Delfino Reyes Bocardo y hermanos cuando era secretario de Comunicaciones y Transportes (SCT) Arturo Archad, en la administración de Melquiades Morales. Después de 10 años desapareció sin que nadie la extrañara debido presuntamente a que nunca se invirtió en la reparación de los camiones. En un reportaje de Guadalupe Gálvez se pudo observar en un recorrido por la Estación de Transferencia, construida con recursos públicos y que tenía el objeto de facilitar a los usuarios el trasbordo.
Por lo tanto, las 12 unidades dejaron de salir a las calles después de los comicios del 4 de julio de 2009, pese a que la SCT había cancelado un año antes el permiso para prestar el servicio. La Estación de Transferencia fue inaugurada en abril de 1999 por Melquiades Morales y Arturo Archard, se convirtió es un “corralón privado”, donde se guardaban autobuses de Delfino Reyes así como las rutas Agua Azul-Mayorazgo. Los autobuses tenían la ruta desde Agua Santa por la 11 Sur-Norte hasta el bulevar Héroes del 5 de Mayo, bajando por la 8 Poniente; ahora sólo queda chatarra de esas unidades.