Esto, debido a que el gobierno municipal no puede intervenir en tareas específicas del INAH porque requieren de un trato especial para mantener las especificaciones originales del templo. Al respecto, el secretario de Gestión Urbana y Obras Públicas, Felipe Velázquez Gutiérrez, informó que tras la visita del edil capitalino la instrucción inmediata fue cuantificar los daños para determinar la cantidad de recursos que podrían ser destinados para la restauración del templo.
El funcionario municipal explicó que también la indicación fue la de establecer personal especializado que acudió al inmueble para realizar un diagnóstico y una evaluación de las afectaciones sin tocar absolutamente nada. Velázquez Gutiérrez señaló que hay elementos que deben ser intervenidos por especialistas, como un lienzo y cuadros de gran importancia histórica, además garantizó la intervención —incluso con recursos— del gobierno de Puebla.
El secretario de Gestión Urbana resaltó que antes de realizar cualquier acción, la comuna poblana esperará se realice el peritaje correspondiente por parte del INAH con el cual se pueda definir las afectaciones de manera precisa, ya que eso —aseguró— permitirá hacer válido un seguro federal con el que cuenta dicho inmueble al ser catalogado como patrimonio cultural.
El titular de la obra pública en el municipio reiteró que de manera formal hoy fue la primera valoración de las afectaciones, por cual estimó que llevará unos días determinar los daños y, en consecuencia, iniciar con los trabajos de restauración.
Velázquez Gutiérrez informó que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) le informó que por ser un inmueble protegido al ser Patrimonio Histórico de la Humanidad se cuenta con un seguro para iniciar la restauración del lugar, por lo que antes de que la empresa aseguradora inicie con los trabajos para el peritaje oficial el municipio se encargará de realizar un estudio rápido sin tocar una sola pieza con la intención de valorar el costo de la reparación.
De hecho, aseveró que los especialistas iniciaron trabajos desde ayer viernes con la intención de que a más tardar en lapso de 8 días se pueda contar con el peritaje final y conocer el tamaño de la afectación por el incendio al interior de la iglesia y que acabó con dos cuadros antiguos, uno del siglo XVII y otro del XVIII respectivamente. El funcionario municipal explicó que este análisis es derivado del recorrido que realizó el presidente municipal, Eduardo Rivera Pérez, cuando se ofreció en entregar una partida especial para la restauración de este inmueble en caso de que la aseguradora intente no aplicar el seguro o, en caso contrario, si se llegara aplicar el municipio de Puebla no aplicaría un recurso especial.
Velázquez Gutiérrez aseveró que es importante conocer el estado que se guarda del lugar, pues no solo se habla de afectaciones a unos cuadros, sino también hay partes de yeso que se pudieron afectar, al igual que unas piezas de hojas de oro que son precisamente áreas que protegían a las pinturas, por lo tanto hasta que no cuenten con el diagnóstico se podrá conocer el costo total de los daños.
El secretario de Obra Pública admitió que no hay un tiempo definido para contar con el peritaje de parte de la aseguradora, ya que puede repetirse el caso del mercado local donde se tardaron meses para diagnosticarlo.
Sin embargo, por el espacio, ya que se trata de un lugar más reducido, los trabajos no deberán pasar de 15 días como máximo, sin embargo todo dependerá de la empresa. Aseguró que el municipio cuenta con restauradores especializados para realizar los trabajos, sin embargo no se podrán tomar decisiones hasta que la empresa aseguradora realice el peritaje oficial.