El presidente municipal Eduardo Rivera aseguró que en su gestión no habrá “año de Hidalgo”, como ha ocurrido en anteriores administraciones municipales que literalmente saquearon al ayuntamiento.

Por ello sentenció que cualquier funcionario que sea sorprendido en actos de corrupción será sancionado administrativamente o, en casos más graves, será removido del cargo de manera inmediata.

El edil poblano aseveró que todos los funcionarios conocen cuáles son las irregularidades y sus implicaciones por caer en ellas, por lo que no habrá ninguna contemplación para proceder en su contra.

Recordó que al final de cada gestión tanto estatal como municipal, los colaboradores incurren en actos de corrupción, por lo cual dejó en claro que no se permitirán los abusos ni excesos al final de su periodo de gobierno.

“Estamos firmes en los proceso; estamos en el tema de licencias de uso de suelo, permisos para antros, grandes fraccionamientos, gasolineras, estaremos implementando un mecanismo de seguimiento, como lo hemos hecho al inicio de la administración. Ellos ya saben que si se ‘pasan de lanza’ con los trámites y los ciudadanos van pagar las consecuencias.”

Incluso, también pidió a los ciudadanos denunciar este tipo de conductas para que sean investigadas y, si se encuentran culpables, serán castigados conforme lo establece la ley de servidores públicos.

“Me parece que cualquier señalamiento que se haga contra cualquier funcionario debe ser fundado, hay instancias para presentar este tipo de señalamientos o denuncias; lo que es importante es que se presenten las pruebas y pongan nombre y apellido.

”Yo estaré atento a cualquier señalamiento que pueda haber contra cualquier funcionario, estaré en la disposición de que se investigue y se llegue a las últimas consecuencias.”