Al comenzar las celebraciones de la Semana Santa, el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, pidió a los católicos seguir el ejemplo de Jesús y hacer que la Iglesia sea más evangelizadora, que salga de los templos y que se den muestras como la del Domingo de Ramos, que data de hace casi 2 mil años. Asimismo, dijo que estas fechas son para vivir con fe e indicó que para los católicos no son vacaciones.
Durante la celebración del Domingo de Ramos, el arzobispo participó en una breve peregrinación de la capilla del sagrario metropolitano, anexa a la catedral, caminando por el atrio, mientras cientos de personas lo acompañaban portando ramos de palma y cantando.
De acuerdo con estimaciones del personal del templo, la asistencia fue superior a las 3 mil personas en la misa que inició a las 9:30 horas con ese recorrido, además de que se permitió a los artesanos de la palma vender en el atrio.
Con la celebración, el arzobispo, vestido de color púrpura, encabezó el comienzo de los oficios de la Semana Santa, e indicó que la Iglesia no puede prohibir a la gente que se vaya de vacaciones, pero sí puede pedirle que en donde se encuentre busque un templo para cumplir con sus obligaciones católicas, sobre todo los principales días, que son jueves, viernes, sábado y domingo. Indicó que estos cuatro días serán de abstinencia y reflexión.
Ante cientos de católicos que llevaron las palmas para que fueran bendecidas en el atrio de la catedral, Víctor Sánchez señaló que esta semana es la más importante para los católicos, ya que se ve el misterio de la muerte y resurrección de Jesucristo: “Ante este misterio se debe reflexionar acerca del sacrificio hecho por el hijo de Dios, para vivir la Semana mayor con devoción”.
Insistió en que el Domingo de Ramos es una muestra de cómo la gente debe volver la cara hacia Dios y encontrar la paz.
Asimismo, indicó que para la procesión del Viernes Santo se espera una afluencia de 120 mil fieles —80 mil fieles que participarán directamente en la procesión y otras 40 mil personas— que lo verán en las calles.
Señaló que es la semana más importante para la Iglesia católica y los católicos deben reflexionar desde el acto de humildad, como lo es el lavatorio el Jueves Santo, y ese mismo día la instauración de la Eucaristía y, posteriormente, el martirio que sufre en viernes, la penitencia que sigue hasta el sábado, que están suspendidas las misas hasta las 11 de la noche.
Dijo que será a las 23 horas del 19 de abril y las primeras horas del día 20 cuando se anuncie la fiesta en catedral, ya que Jesús ha resucitado, venció a la muerte.
Reiteró su llamado a los católicos para que vivan los días en oración y mediten para hacer el bien a sus semejantes.
Santos oficios
Mañana martes el arzobispo oficiará la misa crismal, con la bendición de los santos oleos; además, se espera la presencia de la mayoría de los sacerdotes de la arquidiócesis.
El Jueves Santo —al mediodía— se hará el clásico lavatorio de pies a los sacerdotes ancianos.
El Viernes Santo la procesión partirá de la catedral, llevando las esculturas del Señor de las Maravillas, Jesús Nazareno, Padre Jesús, Nuestra Señora de la Soledad y Nuestra Señora de Dolores. El Vía Crucis empezará a las 10horas, y a las 12 horas la caminata de la procesión que parte de catedral, con una parada en el santuario de Nuestra Señora de Guadalupe para la segunda reflexión, y retorno a las 15 horas a la catedral. A las 17 horas el arzobispo preside la liturgia de la palabra, la adoración de la cruz y la distribución de la comunión.
El Sábado Santo el arzobispo presidirá la Vigilia Pascual y el domingo —a las 10 horas— la misa de Pascua, para celebrar la resurrección de Cristo.