Las tertulias culturales continúan en el Britania La Calera para consolidar las artes plásticas y las bellas artes. El mes de julio es dedicado al icono cultural, social y político mexicano: Frida Kahlo. La admiración por la esposa del muralista Diego Rivera  logró que 14 pintoras poblanas expongan sus cuadros en el club. Además, se revivió la anécdota entre el doctor Rafael Mendívil y la artista en 1952.

Siempre es importante dedicar tiempo a la cultura y a los personajes, representativos de nuestro país, puntualizó Jorge Arroyo García. El presidente del patronato Club Social Britania La Calera, destacó que el deporte no está peleado con el mundo cultural.

Un auditorio ávido por conocer parte de la vida de Frida Kahlo escuchó que en  1913 sufrió un ataque de poliomielitis que afectó permanentemente el uso de su pierna derecha.

Esa fue la primera herida ‘mortal’ de Frida que derivó en el mito cultural que ahora conocemos. El público conoció que a sus 16 años, cuando realizaba estudios en la Escuela Nacional Preparatoria del DF conoció a Diego Rivera quien pintaba su mural La Creación en la escuela, posteriormente fue herida en un accidente de tranvía. Durante su recuperación, es cuando Frida inició el proceso de su arte. Tres años después presentó a Diego Rivera algunos de sus trabajos, el muralista le indicó que siguiera pintando y el 21 de agosto de 1929 se casaron.

Diego Rivera se convirtió en el tutor cultural de Frida, cuya obra fuera la evidencia de lo mexicano recurriendo con frecuencia a temas folclóricos. 

Algunas de las pinturas expuestas reflejan el dolor de Frida pero con la disposición de plasmar el sentir de la vida.

El auditorio se enteró que, durante la convalecencia del accidente, comenzó a pintar tomándose ella como eje principal de su obra.

Durante la tertulia recordaron que a Frida le instalaron un espejo bajo su cama y un carpintero le elaboró un caballete que le permitía pintar estando acostada. "Me retrato a mí misma porque paso mucho tiempo sola y porque soy el motivo que mejor conozco." 

La mano de Frida para el doctor Mendívil

A lo largo del homenaje a Frida Kahlo, Dolores Memdívil, hija del doctor Rafel Mendívil, recordó el corto paso de la artista por Puebla capital.

Dolores Mendívil dijo que Frida viajó a ciudad de Puebla para continuar su tratamiento en  1952 siendo atendida por el doctor Rafael Mendívil, alumno del doctor O’ Farill, en quien confiaba plenamente para mantener su tratamiento.

La pintora, dijo Dolores, se sintió bien cuidada por el doctor de 37 años y mostró confianza plena  en él.

“Frida regaló a mí padre ‘su mano’  dibujada con lápices de colores dedicada que dice: La mano de Frida Kahlo para el Dr. Mendívil cariñosamente y por la paz dentro de la cirugía”.

Dolores Mendívil indicó que Frida creía en  la gente, en su palabra, en su historia, en su posibilidad, en sus sueños, en su calidad, además, hizo de ella misma un motivo de admiración para los demás.

Exposición 

A lo largo de la tertulia cultural se realizó el performance “Las dos Fridas” con ballet folclórico del Britania La Calera que recibió el reconocimiento de los presentes.

Posteriormente, Jorge Arroyo García inauguró la exposición dedicada a Frida Kahlo realizada por artistas poblanas, la mayoría refleja el rostro de la esposa de Diego Rivera y –otras– muestran los rostros de las pintoras emulando a Frida.

“Las presentaciones culturales continuarán dándose porque el Britania La Calera es un club social en donde se realiza ejercicio y se aprende de la cultura”, destacó Jorge Arroyo García.