Ante las críticas de peatones, sector empresarial, automovilistas y especialistas en movilidad a los bolardos instalados en calles del Centro Histórico y perímetros de la metrópoli, algunos activistas de colectivos dicen que son positivos.
Pero reconocieron que ese mobiliario público, reprobado por un gran sector de poblanos, deberá ser cambiado a otras zonas de la ciudad.
Desde su perspectiva, los bolardos salvan vidas de peatones porque impiden a los automovilistas irresponsables conducir sus unidades a mayor velocidad de los límites permitidos por la autoridad vial de la SSC.
Pero el grupo de personas que pretende generar conciencia de la importancia y objetivo delos bolardos por salvar vidas omitió recordar que los regidores nuevamente estudian el proyecto porque la instalación de esas herramientas viales evidenció la carencia de un estudio serio de la encargada de la Secretaría de Movilidad, Alejandra Rubio, y de los propios regidores de la comisión de Movilidad del Ayuntamiento.
El trillado lema de ‘no más muertes viales’ fue el escudo de los jóvenes se escuchó en la esquina de la 5 Oriente y 4 Sur, los chicos y chicas, pretenden convencer a la población de que los bolardos son buenos para el cuidado cotidiano de los peatones porque “todos somos peatones”.
Los “bolardistas” están equivocados, destacó un peatón que en esos momentos caminaba por la acera de la 5 Oriente y 4 Sur, además dijo que seguramente "son los paleros de Rubio Acle".
El ciudadano que pidió la gracia del indulto porque asegura que este gobierno morenista actúa a la vieja usanza del PRI, al enviar a su ejército para tratar de convencer de las bondades de un plan mal estructurado desde su origen.
Además precisó que en ciudades globales como Guadalajara, sí existen bolardos en el panorama vial, pero están instalados sobre las aceras.
En ese marco, la presidenta del Consejo Ciudadano de Movilidad, Claudia Orea, recordó que son las calles del Centro Histórico donde más peatones existen, por eso, es básico que sigan instalados en esos sitios donde ya están.
Puntualizó que algunos bolardos al estar mal situados, posiblemente deberán de ser reubicados, aunque dijo que esa acción dependerá de un estudio que deberá desarrollar la Secretaría de Movilidad de Rubio Acle.
Acentuó que a las autoridades les faltó proporcionar información para que los ciudadanos se vayan acostumbrando a los bolardos, a sus múltiples virtudes y el fin del programa de la Zona 30, que detonó la administración de Luis Banck Serrato, pero, dijo que no emprendió acción alguna.
Destacó que la instalación de los bolardos la emprendió la Secretaría de Infraestructura y no de Movilidad, pero olvidó informar que las especificaciones puntuales de los lugares donde los bolardos se instalaron, salieron de la dependencia de Rubio Acle.
Reiteró que varias calles del Centro Histórico llevan años siendo una Zona 30 y en algunas continúan teniendo velocidades de 90 kilómetros por hora, además dijo, no sabe por qué dicen que no se requieren.