Al sumarse a la exigencia de los estudiantes de Medicina y de toda institución para que regrese la seguridad a la entidad y se haga realmente justicia por el asesinato de los cuatro jóvenes el lunes pasado en Santa Ana Xalmimilulco, Huejotzingo, dos estudiantes de intercambio de Colombia: Ximena Quijano y José Antonio Parada; el alumno de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP), Francisco Javier Tirado y Josué Emmanuel Vital conductor de un vehículo Uber, el rector de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), Emilio José Baños Ardavín advirtió que el reclamo es justo y se comenzará la integración del pliego petitorio a las autoridades y un banco de propuestas para atender los problemas de inseguridad y descomposición social que se vive.
Durante su mensaje a la comunidad en la entrada del campus central de la UPAEP, celebró la iniciativa de “nuestros” estudiantes porque es tiempo de levantar la voz, de hacer presencia y como autoridades ser capaces de acompañar, sumarse; esa es la virtud de los universitarios, esa capacidad de encontrarse, dialogar y construir caminos juntos.
Acentuó que la comunidad universitaria poblana está viviendo un momento histórico, que deberá traducirse en las bases para lograr un cambio en beneficio de la sociedad del estado y de México.
“Celebro que ese espíritu de liderazgo transformador, de ver el beneficio de una sola institución veamos por el bien de la sociedad. Este es un momento crucial para nuestro México, para Puebla y para nuestras universidades. Tenemos la responsabilidad histórica de asumir este compromiso histórico con seriedad para encausarlo hacia la construcción de un mayor escenario de construcción y de paz”.
Ante estudiantes que realizaron una protesta en la entrada de la UPAEP, 21 Sur 1103, Baños Ardavín subrayó que comenzó un proceso de consultas para conformar un documento de exigencias y compromisos luego de los crímenes de Ximena Quijano Hernández y José Antonio Parada Cerpa, estudiantes de intercambio en la UPAEP, doctores de pregrado de Colombia; Francisco Javier Tirado Márquez, estudiante de la Facultad de Medicina de la UAP que realizaba prácticas de su servicio social y del conductor de una unidad del transporte privado-mercantil de Uber, José Emmanuel Vital Castillo.
“Acaban de suceder dos momentos importantes: uno que ha sido un proceso de diferentes diálogos, reflexiones de los estudiantes, en un primer momento entre un servidor, estudiantes y representantes de mesas directivas para tener el inicio de un proceso de consultas para construir una serie de exigencias ante nuestras autoridades y compromisos nuestros; y el otro momento ha sido un encuentro con los padres de familia de Ximena y de José Antonio”.
Valoró que los papás de Ximena Quijano Hernández y José Antonio Parada Cerpa dieran una muestra ejemplar al solicitar que la muerte de sus hijos se convierta en un llamado para que regrese la paz a México.
“El primer acto que uno puede generar en un momento como este, es el de una muestra de cercanía y de solidaridad. Los padres de Ximena y de José Antonio han dado una muestra fuera de serie, ellos me han expresado y me han reiterado es que lo que quisieran dentro de todo este duelo, es que la ofrenda de las vidas de Ximena y de José Antonio sean las bases para construir un escenario de paz y armonía en nuestro México”.
Los padres de Ximena y José Antonio, recordaron que los chicos disfrutaban su vida en Puebla, en la UPAEP, el contacto que tuvieron con diferentes estudiantes y profesores. eso debe llevar a la reflexión y a compartir un duelo en diferente medida y en diferentes ámbitos, “todos compartimos como comunidad universitaria y como sociedad, que de la reflexión pasemos al compromiso y a la acción”.
Luego del mensaje, la comunidad estudiantil de la UPAEP se realizó un minuto de silencio, posteriormente un minuto de aplausos en memoria de los cuatro jóvenes que fueron asesinados el fin de semana pasado.