Aunque las lluvias que han azotado a Puebla en los últimos días han sido abundantes, los vasos reguladores de Puente Negro y El Santuario se mantienen en niveles positivos, no representan peligro para los vecinos que habitan esas zonas. 

Además, los aguaceros se mantendrán durante las siguientes dos semanas por el huracán Hanna que tocó suelo texano, pero afecta a una gran parte del territorio nacional. 

Los trabajos de monitoreo se han redoblado, al igual que las supervisiones a las alarmas hidrológicas para corroborar que los niveles del agua no supere el semáforo rojo.