Ante las acusaciones de presunto vandalismo al Congreso y a estaciones de RUTA, durante la marcha 8M, las dos trabajadoras del ayuntamiento señaladas por autoridades estatales y legisladores, acudieron a la Comisión de Derechos Humanos (CDH) para ratificar la queja.
Las imputadas ante el acoso y el señalamiento "erróneo de haber cometido actos de vandalismo", pidieron protección, expuso la encargada de despacho de la Secretaría para la Igualdad Sustantiva de Género, Vianeth Rojas Arenas.
El 8 de marzo la marcha por el Día Internacional de la Mujer transcurría en orden desde su salida enfrente de las oficinas de la CDH de la 5 Poniente y 5 Sur, pero un grupo de chicas del último contingente paró en frente del inmueble de la LX Legislatura para comenzar a pintar, romper vidrios de las ventanas con martillos, fierros y palos.
El vandalismo se apoderó de unas jóvenes que lanzaron objetos con fuego a las puertas del Congreso y PRI municipal, pero un contenedor con gas pimienta a una de ellas explotó cerca del rostro y las chicas corrieron a la 16 de Septiembre; ahí el contingente tomó fuerzas y regresó.
Las chicas enfocaron sus fuerzas en romper más vidrios, intentar quemar las puertas. Además, a las mujeres se les acusa de causar daños a inmobiliario del Sistema Articulado de Transporte (RUTA), localizadas sobre el Bulevar 5 de Mayo.
Rojas Arenas recordó que la campaña de desprestigio de las trabajadoras comenzó esa misma noche del segundo lunes de marzo.
Bajo ese panorama, semanas atrás el secretario general del ayuntamiento de Puebla, Damián Romero anunció que acudirían a la CEDH y si no reciben una respuesta positiva a la sede nacional de la CNDH.
Ahora las mujeres esperarán el resolutivo de la Comisión de Derechos Humanos para definir el proceso legal que continuarán.