Los trabajos literarios de Gabriel García Márquez, escritor colombiano y Premio Nobel de Literatura en 1982, son un reflejo de la historia de América Latina, afirmó Humberto Sotelo Mendoza, investigador de la Vicerrectoría de Extensión y Difusión de la Cultura (Vicedc) de la UAP.

Durante un homenaje a Gabriel García Márquez realizado en el Museo de la Memoria Histórica Universitaria, indicó: “Lo queremos tanto en toda América Latina porque nos hizo ver que es una sola nación y continente, podrá haber diferencias geográficas e históricas pero somos una sola nación. Gracias a García Márquez somos capaces ahora de apreciar nuestra realidad, en particular sus procesos humanos. Permite ver con nuevos ojos la realidad que oculta la vida cotidiana, las rutinas y convenciones para recuperar la capacidad de asombro”.

De esta manera, no se limita a mostrar lo maravilloso de la realidad; en contrapunto, evoca sus proyectos truncados, su lacerante historia de golpes de Estado y revoluciones frustradas, comentó.

Sotelo Mendoza destacó que el sello distintivo del Premio Nobel de Literatura es la soledad, tema presente en La hojarasca, El coronel no tiene quien le escriba y El otoño del patriarca: “Irónicamente, si en algo nos ayudan sus libros es a superar la soledad”.

Víctor Bacre Parra, colaborador en el periódico Milenio y exvicerrector de Extensión y Difusión de la Cultura de la institución, lo describió como un genio, aquel con la suficiente fuerza intelectual para inventar cosas nuevas. “Fue un genio en toda la extensión de la palabra, igual tocaba el piano y dibujaba bien. Fundamentalmente se dedicó al periodismo, por lo que dio sentido a esta profesión; tanto, que sus experiencias en el área influenciaron la currícula de la carrera de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Iberoamericana, fundada en 1960”, argumentó.

En su intervención Marco Antonio Cerdio Rousell, especialista en crónica contemporánea y académico del Colegio de Lingüística y Literatura Hispánica de la Facultad de Filosofía y Letras de la UAP, comentó que el mundo literario vive un fenómeno poco común, ya que ni el fallecimiento de Octavio Paz, quien fue Premio de Nobel de Literatura en 1990, se compara con la expectación entre la población que originó la muerte de García Márquez.

Dicho fenómeno quizá se deba a la simpatía que logró con sus lectores, quienes de cierta manera se identifican con el novelista y cuentista colombiano, expresó.

Cerdio Rousell expuso acerca de la vida del escritor, quien dejó la carrera de Derecho para dedicarse al periodismo, sus años en dicha profesión, su amistad con el líder cubano Fidel Castro, las razones por las que pidió asilo en México, entre otros aspectos relevantes de conocer sobre la vida de Gabriel García Márquez.