“Ese autobús es de los norcoreanos”, expresó uno de los jugadores al momento de perfilarse a abordar la unidad a la salida del hotel de concentración rumbo a la cancha del Colegio San Ignacio, ubicado a un costado del Atanasio Girardot.
El transporte tiene en los costados casi en la parte delantera la bandera de Norcorea para la identificación y asignación respectiva pero ni modo, los mexicanos tuvieron que subir para ser trasladados a la cancha de entrenamiento.
Después de aproximadamente media hora de haber llegado a su destino apareció el autobús de los mexicanos y la explicación fue que no llegó a tiempo porque se entretuvo en el tráfico, lo cual también resultó extraño porque es sábado y como es lógico las vís terrestres están más despejadas que de lunes a viernes.