Rubiales comunicó la decisión en presencia de más de un centenar de jugadores, entre ellos el capitán de la selección española, Iker Casillas, e internacionales como Carlos Puyol, Xabi Alonso, Fernando Llorente, Javi Martínez y Santi Cazorla, y respaldado por presidentes de asociaciones de futbolistas de otros países, incluido el del sindicato mundial (FIFPro), Leo Grosso.
"Los futbolistas nos hemos unido y hemos dicho basta ya. AFE y todos los futbolistas de Primera y Segunda división hemos tomado la decisión firme, unánime y responsable de convocar huelga para las dos primeras jornadas. La liga no dará comienzo hasta que se firme un nuevo convenio colectivo", afirmó Rubiales.
El presidente de AFE indicó que la convocatoria de huelga no significa que el sindicato vaya a dejar de negociar para tratar de alcanzar un acuerdo sobre el convenio, "por el bien del futbol", aunque el paro podría prolongarse si persiste la falta de acuerdo.
"A los futbolistas no se les puede pedir más. Los futbolistas no quieren más dinero, quieren que se cumplan los contratos, que se vele por las deudas pasadas, presentes y futuras y que todos los que disfrutan del mundo del futbol lo hagan como una competición sana, en condiciones de igualdad, donde los futbolistas sean tratados igual en un equipo que en otro", añadió.
Rubiales denunció que el acuerdo "unilateral" adoptado por la Liga el pasado día 3 para crear hasta 2015 un fondo con el que garantizar las deudas salariales de los jugadores de clubes en concurso es insuficiente "para cubrir las deudas de este año y las que se generen después".
"Casi 50 millones de euros y más de 200 futbolistas afectados este año. El año pasado 12 millones y cerca de cien afectados. Aún así la competición continuó por una decisión responsable de los jugadores, con plantillas en situación lamentable, pero con el compromiso de que no sucedería lo mismo esta temporada", dijo.
En este punto el gerente de AFE, Luis Gil, argumentó con datos que el acuerdo de la LFP sobre el fondo de garantía concursal hasta la temporada 2014-2015, en el que fija "un límite global de 10 millones de euros por temporada, es insuficiente a todas luces".
"El 30 de junio de 2015 quedan sin garantizar 10.427.000 euros de la temporada 2010-2011, a los que se deben sumar la totalidad de las deudas generadas durante las cuatro temporadas de vigencia de este nuevo convenio", indicó.
Rubiales añadió que "el acuerdo de la Liga deja de lado todo lo tratado" y cuestionó que está condicionado además al cambio de la ley concursal, que fue aprobado en el Congreso y está actualmente en el Senado, por lo que la modificación puede aprobarse en septiembre.
"No queremos únicamente medidas paliativas. Hemos propuesto, como en Alemania, Inglaterra u Holanda, que haya medidas preventivas. Allí, el club que no va a pagar no compite. Hemos pedido que a los jugadores que les adeudan tres mensualidades puedan romper su contrato. Parecía que había acuerdo, pero se dejó a un lado", dijo.
Rubiales también recordó que finales del pasado enero la Liga denunció el convenio colectivo, lo que ha obligado a negociar otro en el que la AFE quiere que se respeten aspectos como los derechos de imagen, el fondo social y los periodos de descanso "que disfrutan en otras ligas".
Jugadores presentes en el acto como Abraham Paz, futbolista la temporada pasada del Hércules y del Cartagena en la actual, y José María Movilla, del Rayo Vallecano, tomaron la palabra para reafirmar que no habrá fútbol hasta que no haya nuevo convenio.
"El futbol español se ha unido hoy día. Todo el mundo está aquí y no se va jugar al futbol hasta que no se firme el convenio", dijo Paz emocionado, mientras Movilla señaló que tanto sus compañeros como él "no van a parar hasta que no se solucione"
"Es inadmisible que un trabajador durante tantos meses esté sin cobrar y encima lleguemos a la siguiente temporada y no tengamos garantizado nada", añadió.
También tomó la palabra el presidente del sindicato portugués de futbolistas, Jaoquim Evangelista, quien dijo no comprender que un país como España, "campeón del mundo, tenga este problema". "El convenio de Portugal es mejor que el español", añadió tras solidarizarse con los jugadores españoles.