El británico Andy Murray señaló que se encontrará este domingo a un David Ferrer duro, sólido, y corriendo hasta el último punto, en la final del Masters 1.000 de Shanghai, en un partido que tiene un premio especial para él, pues si gana sobrepasará al suizo Roger Federer y será número tres del mundo.

"Eso es lo que he estado intentando hacer en estos meses, porque creo que no puedo acabar ya el dos o el uno", dijo Murray sobre esa posibilidad.

"Es un objetivo que tengo para el final de mes y sería muy bonito acabar el año como número tres del mundo, porque sería la vez que lo hago en el puesto más alto. No es el objetivo definitivo pero si un paso en la dirección correcta".

Sobre Ferrer admitió que es uno de los "jugadores más duros del circuito para enfrentarse contra él".