Ante una precaria entrada en la catedral de la lucha libre poblana, por fin se dio el ansiado encuentro. Después de la pelea pasada, Máscara exigió a su excompañero y ahora enemigo Volador Jr., se midieran frente a frente para saldar sus deudas de una vez por todas, pues el “Depredador del aire” arrebató la lucha pasada a los científicos con sus malas mañas. Ahora, en el mano a mano, tampoco fue la excepción.

Volador se coronó vencedor ante la Máscara gracias a la ayuda del odiado juez Tirantes, pues en el momento de una rendición sus conteos eran variados de rápido a lento, lo que enardeció al público técnico.

La primera caída fue favorable para el rudo, que con unos cuantos azotes y una “Wilson” se mostró superior ante su retador. Máscara no se desanimó por el inicio y continúo luchando con el fin de darle batalla a su enemigo, que rápidamente reaccionó aplicándole una fuerte patada en el rostro seguido de una plancha desde el esquinero, para escuchar los pausados conteos del Tirantes.

Para el tercer episodio fue notoria la habilidad de ambos guerreros, que entre golpe y patada contrarrestaban los ataques. Ninguno se permitía la derrota y dieron una larga batalla que parecía interminable.

La participación del Tirantes fue fundamental para el desahogo de la pelea, pues cada que la Máscara tenía una oportunidad de ganar “se le cebaba” por los conteos pausados del polémico juez, dando la oportunidad de reaccionar a Volador.

El “Depredador” obtuvo la victoria tras aplicar una quebradora con las rodillas, lo que paralizó a la Máscara dejándolo fuera de combate de la lucha estelar.