El denominado "Tiburón de Baltimore" cronometró un tiempo de 51.21 segundos para colgarse la presea dorada, mientras que el africano Chad Le Clos finalizó en segundo lugar con un tiempo de 51.44 segundos para llevarse la plata; el ruso Evgeny Korotyshkin completó el podio con el tercer mejor tiempo de la competencia.
Con este resultado el norteamericano sigue escribiendo su historia en los Juegos Olímpicos con letras de oro como uno de los mejores atletas en su especialidad y como el mejor y mayor ganador de medallas de todos los tiempos.