Quiere dejar el amarillo por el rojo. A Usain Bolt se le ha metido en la cabeza que su talento da para combinar la velocidad del hombre más rápido del mundo con el talento al tocar una pelota. Tras ganar los 100 metros planos, el jamaiquino de 25 años pidió que Alex Ferguson tome en serio su interés por vestir la camiseta del Manchester United.
“La gente piensa que estoy bromeando, pero si Alex Ferguson me llama y me dice ‘Ok, hagamos esto, ven y hagamos una prueba’, sería imposible para mí decirle que no”, menciona con el aplomo del que ha retado hasta a la física con sus marcas mundiales y olímpicas atenuadas por un festejo que oscila entre la soberbia y la burla.
De inmediata remarca que no es sólo un capricho. Afirma que se siente capaz y que no se expondría a perder el tiempo si no fuera porque
conoce sus atributos dentro del terreno de juego. “No tomaría el reto si pensara que no soy lo suficientemente bueno. Soy un buen jugador y sé que haría diferencia”, declaró cuando los medios británicos le preguntaron cuál era su siguiente reto tras haberse consolidado como el ser humano más veloz sobre la tierra.
También tuvo tiempo para bromear: “Sería el jugador más rápido, pero también puedo jugar”. El velocista recalcó el mensaje a Sir Alex, a quien conoció en 2009 tras una sesión con el Manchester United.
El diario británico The Sun se imaginó cómo sería el cuadro titular con Usain Bolt en el campo. Lo colocó como un medio ofensivo, como un extremo que acompañara los embates de Rooney y Welbeck y que se complementara en el otro costado con Valencia. El número merece mención aparte: 9.63, el tiepo con que se colgó la medalla de oro en los 100 metros planos de Londres 2012.