El estadio de Wembley será el escenario donde ambos equipos se verán las caras en punto de las 15:00 hora local (09:00 del centro de México), con arbitraje de Mark Clattenburg, de la Gran Bretaña.
En su camino hacia la justa veraniega la meta del plantel tricolor era conseguir una medalla, y no cualquiera, así que conforme se fueron dando los encuentros y en base a gran actitud la de oro fue la que quedó a la vista.
Luego de generar dudas en la parte final de su preparación, el Tri ha venido de menos a más durante esta competencia, en la que jugadores como Giovani Dos Santos, Javier Aquino, Carlos Salcido, Jorge “Chatón” Enríquez y Oribe Peralta, entre otros, han alcanzado su mejor nivel, lo cual se reflejó de manera colectiva.
El problema para el técnico Luis Fernando Tena es que no contará con “Gío” quien salió con lesión lesión muscular en el partido ante Japón, sin duda una baja sensible que le abre las puertas a Marco Fabián de la Mora, quien en este momento es cuando debe cargar con el peso del equipo y comandar el aparato ofensivo.
Asimismo, el portero Jesús Corona ha sido garantía en la parte baja del Tri y sin duda sus actuaciones han sido determinantes para llegar al partido por el título, nivel que ahora más que nunca debe mantener para controlar la poderosa ofensiva sudamericana.
La defensa ha tenido “despistes”, en especial Diego Reyes, quien en ese afán por salir jugando o simplemente con exceso de confianza, ha perdido balones, lo cual se debe corregir para un encuentro decisivo como el de mañana.
La presión es algo que México debe saber manejar y eso se le debe cargar a Brasil, que mantiene la obsesión por lograr su primera medalla de oro en Juegos Olímpicos, así que el cuadro tricolor debe hacer un juego inteligente y buscar los espacios en la zaga “verdeamarela”.
El cuadro que dirige Mano Menezes ha cumplido con los pronósticos de colocarse en esta instancia y parte como favorito para finalmente adjudicarse el título.
Brasil puede presumir una ofensiva letal con jugadores como Neymar, Alexandre Pato, Oscar y Leandro Damiao por decir algunos nombres, pero también presenta algún desequilibrio pues aunque viene de golear 3-0 a Corea del Sur, ha recibido seis anotaciones en cinco partidos.
Además, la “canarinha” quiere quitarse ese dominio que México ha impuesto al ganarle en cinco finales, siendo las más importantes la de la Copa Confederaciones 1999 y la de Copa del Mundo Sub 17 Perú 2005.