España ya está en la final de la Copa Davis, la novena de su historia.

David Ferrer continuó con su impoluta racha (nunca ha perdido un partido de Copa Davis jugando en casa) y se impuso a John Isner por 6-7, 6-3, 6-4 y 6-2. El tenista español, que venía de hacer semifinales en el US Open (pista dura), no ha tenido mayores problemas para acostumbrarse a la tierra batida y ha ganado sus dos puntos de la eliminatoria, primero contra Querrey y este domingo frente a Isner.

El rival saldrá del República Checa-Argentina, que serán locales en la final. Para la tan ansiada cita queda resolver la incógnita de si el número uno español, Rafa Nadal, llega a tiempo para disputar el choque.