En dramático partido, Alemania conquistó el cuarto título en su historia tras derrotar por la mínima diferencia en tiempos extra a Argentina, en la final de la Copa del Mundo Brasil 2014 disputada en el Maracaná.

La única anotación y el golazo del encuentro fue obra de Mario Gotze, al minuto 113, con lo que el cuadro teutón se convirtió en el primer equipo de Europa que ganar un Mundial en el Continente Americano.

El poderío alemán nunca pensó que este juego iba a ser tan cerrado, mucho menos que su etiqueta de favorito se pusiera en duda, sin embargo, frío y calculador como es su idiosincrasia, aprovechó quizá la oportunidad más clara para regresar a la cúspide del futbol mundial.

Luego del “paseo” que el cuadro germano le dio a Brasil en semifinales, se pudo pensar que Argentina podría sufrir una suerte similar, sin embargo, el cuadro de sudamericano aprendió bien de esa lección ajena y fue inteligente, ya que sabía que no podía ponerse de “tú a tú”.

La primera misión de la “albiceleste” fue estar bien parado atrás y buscar el contragolpe para intentar abrir el marcador, el cual estuvo muy cerca de inaugurarse en un grave error de Toni Kroos, quien retrasó mal un balón que Gonzalo Higuaín tomó de frente.

Con todo para definir, el ariete del Nápoles de manera increíble mandó su remate a un costado del poste derecho. Instantes después envió al fondo de las redes un centro por derecha, pero le fue anulado por un claro fuera de lugar.

La escuadra alemana, que tuvo que prescindir de Sami Khedira por lesión y de su sustituto Christoph Kramer, sabía que era mejor, sin embargo, no le fue sencillo generar acciones de peligro, más allá de que tuvo el balón con mayor frecuencia en sus pies.

De hecho, la más importante se dio ya cerca del descanso, en un tiro de esquina por derecha que Benedikt Hoewedes conectó de cabeza al poste de manera increíble, para irse así al descanso.

Alejandro Sabella se dio cuenta que podía hacerle daño a su rival con la velocidad, por ello para el complemento ordenó el ingreso de Sergio Agüero, y su equipo vivió quizá los mejores momentos del partido, en los que una vez más estuvieron cerca de terminar con el cero.

La más importante al minuto 47 en un balón filtrado por izquierda que lo dejó solo frente a Neuer, sin embargo, su remate se fue demasiado cruzado a un lado del poste.

Alemania ajustó bien y logró quitarse ese asedio inicial del cuadro argentino, pero sin ser capaz de tomar el control del juego, más allá de la mayor posesión de balón que tuvo.

Por momentos hubo un idea y vuelta de ambos equipos, pero sin a certeza necesaria para aspirar al triunfo, lo que obligó a que se fueran al alargue.

Apenas en el arranque, Rodrigo Palacio tuvo el gol de la diferencia cuando quedó solo frente a Neuer, sin embargo, no controló bien con el pecho lo que lo obligó a levantar el esférico que se fue a un lado.

Schuerrle respondió con un disparo que mandó a las manos de Sergio Romero cuando tenía para mucho más y todo indicaba que los penales sería la vía para definir al campeón, sin embargo, a instantes del silbatazo final, los alemanes se adueñaron del certamen.

Todo se originó en un gran desborde por izquierda de Schuerrle, quien mandó un centro al área donde Mario Goetze, que había entrado de cambio por Klose, controló con el pecho y sin dejarla caer prendió un zurdazo cruzado para dejar sin oportunidad a Romero, al minuto 113.

Desesperado, Argentina intentó ir al frente en pos del empate, pero las piernas ya no respondieron, solo el espíritu que fue insuficiente para doblegar una “trituradora” alemana que asumió ese trono que hace mucho reclamaba, y que ahora solo les pertenece a ellos.

El arbitraje estuvo a cargo del italiano Nicola Rizzoli, quien tuvo una mala actuación, perdonó muchas tarjetas, inclusive algunas rojas. Amonestó a Bastian Schweinsteiger (29), y a Benedikt Hoewedes (33) por los germanos, mientras que Javier Mascherano (64) y Sergio Agüero (65) vieron cartón preventivo por Argentina.

Alineaciones:

Alemania
Manuel Neuer, Philim Lahm, Jerome Boateng, Mats Hummels, Benedikt Hoewedes, Christoph Kramer (Andre Schuerrle, 32), Bastian Schweinsteiger, Thomas Muller, Toni Kroos, Mesut Ozil (Per Mertesacker, 120) y Miroslav Klose (Mario Goetze, 88). DT. Joachim Low.

Argentina
Sergio Romero, Pablo Zabaleta, Martín Demichelis, Ezequiel Garay, Marcos Rojo, Lucas Biglia, Javier MAscherano, Enzo Pérez (Fernando Gago, 86), Ezequiel Lavezzi (Sergio Agüero, 46), Lionel Messi y Gonzalo Higuaín (Rodrigo Palacio, 77). DT. Alejandro Sabella.