El América se convirtió en otro semifinalista de la Liga MX, al derrotar por la mínima diferencia como visitante al Guadalajara, sumando al marcador global 2-1, por lo que dejó sembrados a los tapatíos en lo que pareció un encuentro de trámite para ellos.

Con el más reciente antecedente entre ambos equipos, la Copa MX, donde las Chivas eliminaron en tanda de penales a los capitalinos, todo parecía indicar que los de casa tenían más de medio boleto en la bolsa.

Sin embargo, el América mostró una cara diferente al buscar a toda costa quedarse con el esférico, peleando en cada rincón del estadio del Guadalajara, lo que por momentos sorprendió a los locales.

El primer lapso se jugó con poco ritmo, ningún equipo logró imponer sus condiciones y las acciones se trabaron en medio campo. La presión era para los capitalinos, que tendrían que conseguir un gol en el complemento.

Tras el descanso mejoraron las cosas, América salió con mayor determinación que el rival y se notó su empeño por tratar de ganar el encuentro.

Con la pelea del balón en media cancha, el marcador se movió hasta la segunda mitad, cuando al minuto 54 Oribe Peralta remató un soberbio centro para mandar a guardar la número 5.

De inmediato llegaron los cambios para revolucionar la maquinaria tapatía: Carlos Cisneros dejó su lugar para un Javier López que cargaba en la espalda las ilusiones de la afición rojiblanca.

También ingresaron Néstor Calderón y Marco Bueno, con la misión de darle vuelta a la situación; sin embargo, las cosas no cambiaron más y el Rebaño se quedó sobre la línea en el Apertura 2016.