Al asegurar que lo idóneo para la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP) es que el proceso de elección del nuevo director se posponga hasta que salga Guillermo Nares Rodríguez del cargo, tres de los aspirantes denunciaron actos anticipados de campaña del candidato oficial Carlos Moreno Sánchez y la supuesta parcialidad de los integrantes de la Comisión Electoral.

“Si en algún momento intentan algo en contra de nosotros, es obvio que tenemos que defendernos por la vía legal; estamos haciendo nuestra campaña, nos acompañan estudiantes y haremos una campaña en respeto a la normatividad, porque así lo exige el Consejo de Unidad”, comentó el candidato José Francisco Ávila Caso, quien dijo que por lo pronto encuentran elecciones viciadas.

Por su parte, Fernando Javier Andraca Huerta, también candidato al cargo, reveló que ya presentó una queja ante el máximo órgano de gobierno de la universidad, a la que pueden responder — afirmó — con un espíritu democrático, pero también tiene otra queja en la que denuncian el apoyo del director de la facultad al candidato oficial.

“Nuestro recurso no ha sido resuelto, estamos en espera de respuesta, aunque no vemos de parte de las autoridades, disposición por coadyuvar a resolver el problema y nuestra petición”.

Arturo Rivera Pineda dijo que en la facultad de Derecho y Ciencias Sociales utilizan medios académicos para cuestiones políticas, por eso reiteró que interpusieron una inconformidad ante el Consejo Universitario, pero además también presentaron un juicio de amparo ante el juzgado sexto de distrito, “porque los porros del director condicionan e intimidan”.

Los candidatos de esa facultad denunciaron terrorismo de parte de las autoridades centrales encabezadas por Guillermo Nares Rodríguez, pero además hay presión en contra de todos los integrantes de la comunidad universitaria para brindar apoyo al candidato del director.

“Hay interpuestos un cúmulo de recursos de inconformidad, porque nos preocupa la calidad con la que se conduce nuestra facultad”.

Las comisiones del Consejo de Unidad de la facultad, reveló Francisco Ávila Caso, no resuelven ninguna de las inconformidades presentadas desde que arrancó el proceso electoral y declaran que no son la instancia adecuada: “Prevalecen irregularidades desde el inicio, nosotros iniciamos campaña desde este lunes a las ocho de la mañana y Carlos Moreno Sánchez lo hizo desde el día viernes, subió el logo y la invitación al voto en las redes sociales, algo que no es permisible”.

En respuesta, el candidato oficial aseguró que las denuncias son falacias y que arrancó su campaña el pasado lunes a las 8 horas: “Les pido que dejen a un lado la calumnia, la difamación y la falacia, que se conduzcan con civismo y no quieran sorprender a la gente”. Por eso descartó ser candidato de Guillermo Nares: “Yo soy candidato de los universitarios, de los académicos, administrativos y estudiantes”.

El aspirante oficial dijo que posponer los comicios depende de la Comisión Electoral, por eso reiteró que llama a sus contrincantes a generar un pacto de civilidad y que se conduzcan con compromiso, como lo exige el proceso electoral.

“Yo arranqué campaña el lunes a las ocho de la mañana y no desde el viernes pasado.”

Moreno Sánchez justificó que permanentemente está conectado a las redes sociales y negó que por medio de esos instrumentos electrónicos hiciera alusión al proceso electoral.

“Dejaremos todo en manos de la Comisión Electoral, que es la encargada de dirimir ese tipo de situaciones.”

Impulsa Nares prácticas antidemocrática


Los candidatos a director de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales aseguraron que desde la actual dirección de esa unidad académica se impulsan prácticas antidemocráticas, y Guillermo Nares Rodríguez impuso candidato, pero además encabeza actos de presión y promesas falaces manifestadas en compra de voluntades, envío de correos electrónicos personales desde la Secretaría Académica y presión de parte de los coordinadores de licenciaturas.

Asimismo, acusan compra de voluntades, satanización y condicionamiento en contra de quienes se atreven a señalar deficiencias, pero ante todo eso —concluyeron— la comunidad universitaria de la facultad, sabrá anteponer su vocación democrática en el proceso electoral que está regido por un marco normativo, atrasado y rebasado que no abona en prácticas democráticas relevantes, ni garantiza que el proyecto que se adopte finalmente, sea el que más conviene para la facultad, para la UAP y para México.