"A tres años de gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador, ha abierto una cantidad de frentes enormes y algunos de ellos innecesariamente", dijo el analista político de la IBERO Puebla, Miguel Calderón Chelius.

Señaló que el energético era inevitable, por la concertación con los empresarios por el pago de los impuestos, “con la prensa se excede, el episodio con Carmen Aristegui, independientemente de la investigación, el comentario del presidente fue excesivo, por decirlo elegantemente”.

Calderón Chelius expuso que su debate con distintos académicos y periodistas e intelectuales, muchas veces termina siendo algo innecesario, “con los académicos se han abierto distintos frentes”.

El analista político de la Ibero recordó que el caso más reciente fue el del CIDE (Centro de Investigación y Docencia Económicas), donde hay una discusión con la autoridad, “ha tenido repercusiones con sectores medios en la CDMX por ejemplo, muchos frentes, que algunos de ellos se justificarían, pero todos a la vez, parece excesivo”.

"Hay medidas muy polémicas, por eso, es difícil hacer un balance completamente positivo o negativo, porque los puntos de vista están polarizados".

En ese sentido, el politólogo destacó que cada uno de los proyectos de AMLO tiene su crítica, su lado oscuro, como el caso del Tren Maya, por su parte medioambiental y no dejar en claro que se resuelva de forma adecuada.

En el caso de la refinería Dos Bocas, expuso Calderón Chelius, la crítica por apostar por energías sucias, del aeropuerto, el tren el que menos crítica tiene y es el menos publicitado.

Calderón Chelius, dijo que, en cualquier gobierno hay claroscuros, pero los gobiernos de México se han esforzado en tener solo oscuros, “cualquier diagnóstico y balance que se haga del gobierno de AMLO necesita contextualizarse en la crisis de salud y económica más grande que tienen las sociedades modernas, porque todo sería distinto si no se tuviera esta crisis”.

El politólogo de esa universidad jesuita consideró que en términos económicos, el gobierno sale bien librado y ha sido prudente, “en términos macroeconómicos ha mantenido los equilibrios y no se ha endeudado”.

"Tomó dos decisiones durante la pandemia muy criticables, que fue no endeudarse, no hacer transferencias a los sectores medios y las empresas, porque no hubieran tenido efectos significativos".

El académico, dijo que, en el caso de este gobierno, todo lo económico tiene un componente político muy explosivo.

"En términos políticos, es un gobierno que tiene mucho presidente, un gran presidente, pero el gobierno no está al mismo nivel".

Destacó salvadas excepciones, como la Secretaria de Economía, Tatiana Clouthier, el Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, y el Secretario de Hacienda, Arturo Hernández Gutiérrez, pero no hay un gabinete poderoso.

Dijo que, no hay institucionalidad y a este gobierno le hace falta más Cuarta Transformación y menos Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

“A tres años de gobierno, AMLO, llega muy bien, con mucho apoyo, con mucho respaldo, muy beligerante, Fox no llegó mal, Calderón nunca estuvo bien y Peña Nieto, su gobierno había acabado y le quedó nadar de muertito".

Finalmente, expuso que su predecesor, Enrique Peña Nieto, se descompuso por completo, aunque tuvo dos años con mucho impulso, pero con los casos Ayotzinapa y la Casa Blanca se desfondó.