El Instituto Nacional de Migración (INM) mantiene en opacidad los centros o estaciones migratorias en Puebla y Tlaxcala al no permitir el monitoreo que hacían cada año en esos lugares y con eso ocultan la situación de los derechos humanos de las personas que llegan al lugar.
A decir del académico del departamento de Ciencias Sociales de la Ibero Puebla, Guillermo Yrizar Barbosa, en Puebla no respondieron la solicitud de acceso para el monitoreo de violaciones a los derechos humanos.
Ante eso, dijo que, no les respondieron a un oficio de solicitud de acceso a la información que es lo que permite hacer monitoreo en estaciones migratorias de Puebla y Tlaxcala.
El profesor de esa casa de estudios jesuita de Puebla recordó que, esos oficios los hicieron a finales de 2022 para solicitar el acceso de 2023, “ese oficio no lo contestó las oficinas centrales del INM en Ciudad de México”.
Y es que, dijo, era un oficio que se venía haciendo de hace más de 5 y hasta 10 años y por primera vez no lo respondieron, “eso quiere decir que la universidad, a pesar de lo que permite la ley migratoria y el reglamento para el acceso a estaciones migratorias no puede acceder”.
“Lo que pasó fue que por alguna razón el oficio no lo pudieron contestar antes del incendio de Ciudad Juárez, en el que muchas personas perdieron la vida y después de ese incendio la institución se volvió más hermética”.
Yrizar Barbosa aseguró que, por eso, en todo el año no tuvieron acceso a lo que venían haciendo desde antes y hoy no se tiene la evaluación de lo que sucede en el tema de los derechos humanos en esas estaciones migratorias.
El académico del departamento de Ciencias Sociales de esa casa de estudios dijo por eso que, de los centros de detención de migrantes, lo que saben es muy poco porque existe mucha opacidad.
Sin embargo, dijo, “en el momento en que nos quedamos a partir de lo que pasó en Ciudad Juárez y lo que les comentan que se da en estos lugares, es que hay mucha opacidad”.
Dijo ante eso que, sigue habiendo condiciones que están fuera de la ley, que son condiciones infrahumanas, de maltrato, de entornos sociales torturantes y preocupa la situación de la niñez, de las mujeres y de las familias.
Además, destacó también que hay muy poca o casi nula información de lo que hace o no hace y se puede poco conocer lo que hace el DIF en Puebla y a nivel nacional, “se sabe muy poco de lo que pasa acerca de los casos de niñez no acompañada”.
Por eso, recordó que, según la ley ya no debe haber ni familias ni niñez en los centros de detenciones migratorias y si no dan el acceso para ver lo que pasa, no saben qué sucede.
“Es una situación preocupante y sobre todo al ver los números récord que se observan en los últimos 3 años de detenciones en México, pero también en la frontera con Estados Unidos”.