El suicidio opaca las festividades de fin de año, y aunque más de la mitad de los mexicanos defiende el derecho a decidir cuándo y cómo morir, una tercera parte califica como un acto cobarde quitarse la vida.
Navidad y Año Nuevo están llenos de celebraciones y convivios donde abundan los parabienes, pero también están presentes problemas económicos, sentimentales o familiares que propician la depresión, un estado que de acuerdo con estadísticas puede llevar al suicidio.
Las estadísticas indican que quitarse la vida es un acto en el que incurren más los hombres y que es creciente entre los jóvenes con un rango de 15 a 20 años de edad, lo que coincide con la opinión de 800 mexicanos encuestados por Gabinete de Comunicación Estratégica/Kaleydoscopio (GCE/K).
El desempleo (14.2 por ciento) es considerado como una de las principales causas para orillar a tomar esta decisión fatídica, que se puede combinar con el estado de ánimo.
A la pregunta de si una persona tiene derecho a decidir cuándo y cómo morir, 54.6 por ciento de los consultados estuvieron de acuerdo, 41 por ciento contestaron negativamente y 4.4 por ciento no respondieron.
Al definir por sexo y aunque se dice que las mujeres son más propensas a la depresión, pero 49 de cada cien encuestados piensan que son más hombres los que se suicidan, 21 creen que son las ellas, mientras una cuarta parte de los entrevistados señaló que se matan por igual y cuatro de cada cien no respondieron.
Los datos recabados telefónicamente por Gabinete de Comunicación Estratégica exponen que el mayor número de casos de suicidio está en el rango de 15 a 20 años, 35.4 por ciento.
Le siguen el grupo de 20 a 30 años, con 14.9 por ciento; los menores de 15 también son representativos, con 12.2 por ciento, y otros se limitaron a decir que son jóvenes o adultos mayores de 30 años.
Pero ¿qué estado de ánimo origina quitarse la vida?, 26.6 por ciento de los participantes fueron contundentes al señalar depresión, 9.5 por ciento mencionaron que actitudes y comportamiento llevan a tomar esa decisión.
Otro 8.6 por ciento de los sondeados opinaron que la baja autoestima; 8.3 por ciento, la tristeza o el poco ánimo; 5.7 por ciento, problemas mentales, y 4.1 por ciento consideraron que los nervios pueden orillar a las personas a quitarse la vida.
En los últimos años la tasa de suicidios en México ha aumentado y como principal causa de este incremento Kaleydoscopio/GCE obtuvo las siguientes respuestas: desempleo, 14.2 por ciento; mala economía familiar, 13.6 por ciento, y desamor o infidelidad, 8.4 por ciento.
Les siguen desintegración familiar, en 7.4 por ciento de los casos; problemas económicos o deudas, 7.3 por ciento; inseguridad o pobreza, seis por ciento, y depresión, cinco por ciento.
El Gabinete de Comunicación Estratégica pidió a la gente calificar qué tan aceptable o reprobable es que alguien se suicide o lo intente, con una escala donde cero es totalmente reprobable y 10 completamente aceptable.
En ese sentido, 53 por ciento calificaron con cero, en tanto que 10.2 la valoró con 10. El resto de la evaluación registró las siguientes cifras: 2.5 dio uno, 2.4 otorgó dos, 2.5 se ubicó en tres, 1.5 se colocó en cuatro, 10.8 se pronunció por cinco, 1.9 palomeó seis, 2.3 sentenció siete, 6.3 anotó ocho y 3.1 se quedó en nueve. Sólo 3.8 guardó silencio.
Esto va en concordancia con que 31 de cada cien participantes establecieron que el suicidio es un acto cobarde, mientras que 25 manifestaron que es un derecho personal, 15 lo creen un pecado, 12 una enfermedad, cinco un delito y cinco un acto de valentía; seis callaron.
Para 12 de cada cien de los entrevistados el suicidio es una enfermedad y de hecho una gran mayoría lo atribuyen a un problema de salud mental.
La vida urbana es vista como factor que conlleva a los atentados contra la propia vida, tanto que 82 de cada cien interrogados aseguraron que los suicidios ocurren más en las grandes urbes, mientras que siete dicen que en las pequeñas y seis que en ambas comunidades.
En cuanto a la influencia que representa tener una relación, 37 por ciento de los mexicanos cree que son los solteros los más predispuestos y 39.2 se inclinan por los que tienen pareja; 18.7 tienen la idea de que se matan por igual y 4.2 por ciento no saben.