Las transparencias, los bordados, el encaje y los drapeados envuelven las piezas de la colección primavera-verano 2015 de Chantal Thomass y se tiñen de color pastel, gris perla, amapola y de los clásicos negro y blanco para plasmar el mensaje que la diseñadora quiere transmitir. La seducción, la decadencia, el libertinaje, la picardía y el glamour son el leitmotiv que Thomass sigue para recuperar a modo de remake piezas icónicas pertenecientes a una colección que lanzó en la década de los 90 y que fueron popularizadas por modelos como Eva Herzigová.
Chantal Thomass lo tiene claro, la lencería es algo más, mucho más, que una prenda interior y funcional, es la clave de la seducción, que comienza por seducirse a una misma, por gustarse, y también se acerca más que ninguna otra cosa a la esencia del deseo, porque el deseo se alimenta en el juego y muere en la monotonía.
El otoño de 2014 llega con aires vintage, es una evocación del glamour asiático y la sofisticación francesa sin dejar de lado cierto aire del S.XVIII que forma parte de la esencia de la propia firma; tiene además cierta pátina cincuentera o incluso anterior, de los tiempos del charleston y los felices años 20, de Daisys, Gatsbys y la sofisticación de entonces. Es una colección elegante y favorecedora que cuida y mima cada detalle para crear looks absolutamente seductores con ese punto justo de erotismo que pocas firmas utilizan con la maestría que lo hace Chantal Thomass.
En su campaña, la firma francesa convierte sus prendas íntimas y lenceras en el atuendo único de un día a día de lo más especial, de la cena al café, llegando a las copas, la fiesta y el baile luciendo corsés, transparencias, encajes, bordados, drapeados… en cuerpo entero o en dos piezas, con ligueros, medias y mil detalles que complementan un look hilarante, como hilarante sería lucir prendas leceras como si fuesen trajes de noche pero, a la vista de las propuestas de Chantal Thomass para el próximo otoño, no podemos negar que el asunto es de lo más tentador… ¿te atreves?