El arzobispo de Puebla Víctor Sánchez Espinosa llamó a los católicos a mantener la fe mariana y venerar a nuestra Señora de Nazaret, mejor conocida como la Virgen de Monte Carmelo, o simplemente Del Carmen que ha unido por más de cuatrocientos años a los poblanos.

Al presidir la misa en el templo de la 16 de Septiembre y 17 Oriente, uno de los más representativos de la ciudad recordó cómo un grupo de ermitaños comenzó a venerar a la virgen María en Nazaret, concretamente en el Monte Carmelo.

Indicó que fue un símbolo de unidad y en los primeros años del cristianismo era la devoción a la Señora de Nazaret, y posteriormente Nuestra señora del Monte Carmelo.

Indicó que es la fe mariana la que une a los católicos para pedir a la madre de Jesús que interceda ante el creador para que haya salud y paz en la tierra.

Recordó que en Puebla hay una devoción de más de 450 años hacia la Virgen del Carmen, fervor que va en aumento.

Aseguró que el arraigo religioso no ha descendido, aunque es importante ver la unión de las celebraciones eucarísticas con la convivencia que anteriormente se daba.

“La devoción ha tenido un gran arraigo, misas desde las 6 de la mañana, a la 1 de la tarde hubo misa del arzobispo, cinco de la tarde siete y ocho de la noche. Los fieles podrán experimentar el amor de Dios en su madre santísima.”

“Es interesante que tras la celebración religiosa haya un espacio de convivencia, una de las fiestas religiosas mas importantes y con más arraigo en Puebla.”

Historia y religión

Los Carmelitas Descalzos recibieron de la Iglesia de Puebla la ermita de Los Remedios —no era la de El Carmen— a finales del siglo XVI.

Los religiosos se encargaron de construir la iglesia y hacerla esplendorosa, por lo que lograron que en lugar de la virgen de los Remedios quedara la virgen de El Carmen como patrona.

En México, la devoción a la Virgen del Carmen llegó junto con los frailes carmelitas que arribaron a tierras aztecas en 1585, mismos que el 13 de julio de 1586 fundaron el Convento del Carmen de la ciudad de Puebla (ubicado en la 16 de Septiembre y 17 poniente) que fue además el segundo en América.

Desde su llegada a Puebla, la orden Carmelita tuvo gran aceptación por parte de los pobladores, situación que con el paso del tiempo se ha ido acrecentando, permitiendo que la ahora parroquia del Carmen sea el centro de reunión no solo dominical sino de celebraciones importantes, como bodas, preferido de los poblanos tradicionalistas.