El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa se lanzó contra quienes promueven la interrupción legal del embarazo (ILE) al señalar que forma parte de la "cultura del descarte y muerte".

Desde la Catedral, el líder de la grey católica reiteró su postura de defender la vida desde la concepción hasta la muerte natural, y reiteró su desaprobación hacia la comunidad que no "aprecia" el valor de la vida.

“Nosotros rechazamos todo lo que contribuye a la cultura de la muerte, a la cultura del descarte como lo llama el Papa Francisco, también profesamos nuestra esperanza en la plenitud absoluta de la vida y en la consumación de todo”.

En ese sentido, Víctor Sánchez Espinosa lamentó que la sociedad haga a un lado a los grupos vulnerables como los adultos mayores, los enfermos y las personas con discapacidad, al señalar que esto surge por un argumento equívoco de que han dejado de productivos y no cumplen con todas las acciones que deben realizar supuestamente las personas normales.

"Esa es la cultura de la muerte y vivimos en esa sociedad, queremos descartar todo eso porque el único que dispone de la vida es Dios”.

Además, el líder católico subrayó que cuando se privilegia la cultura de la muerte, el descartar y el aborto, se presentan los problemas de violencia y de la inseguridad en México.

Por otro lado, Víctor Sánchez Espinosa, criticó los contrastes existen en la sociedad como las grandes desigualdades y los  abusos qué se cometen todavía en contra de las personas más vulnerables tras la pandemia del Covid-19.

Mantener la esperanza, clave para el cambio

En contraparte, llamó a mantener la esperanza ante los grandes problemas que está enfrentando la comunidad, y esta debe ser acompañada para quienes más lo requieren.

"La sociedad en que vivimos hoy, nosotros, es mayoritariamente, saducea, o sea, nos preocupamos de vivir el bienestar en esta vida de una manera frívola, disoluta, pecaminosa, disfrutando del propio bienestar y olvidando a quienes viven sufriendo y ese estilo de vida es equívoca”.

Recordó que la vida no radica, ni se basa en perpetuar esas grandes desigualdades y en los abusos que se comenten en el país y en el mundo.

"La felicidad,no se consigue a través de la cultura del descarte y la muerte por ser caminos equivocados, a costa del sufrimiento de los demás y sin apoyar a quienes están enfrentando dificultades para vivir".

Finalmente, explicó que este tipo de mentalidad, favorece para que mucha gente busque la felicidad en caminos equivocados, vive una cultura que valora la felicidad ficticia.